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¿Siempre llegas tarde? Estos consejos te ayudarán a dejar de ser impuntual

Ser impuntual te hace ver como una persona poco organizada, irresponsable y que no respeta el tiempo de los demás. Si reconoces que te cuesta estar a tiempo en los lugares, aplica estos consejos

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¿Siempre llegas tarde? Estos consejos te ayudarán a dejar de ser impuntual
Aunque la impuntualidad es un tema que se ha asociado incluso a la identidad de los dominicanos, eso no quita que sea un hábito de mal gusto. (FREEPIK)

“La actividad empieza a las 5:00, pero para ti es a las 4:30”. Sí, se trata de una frase con la que muchos se sentirán identificados, y si es tu caso te tenemos malas noticias: eso quiere decir que eres el que siempre llega tarde. Aunque la impuntualidad es un tema que se ha asociado incluso a la identidad de los dominicanos (de ahí la expresión ‘hora dominicana’, para referirse a que el evento o la cita no empezará a la hora estipulada), eso no quita que sea un hábito de mal gusto.

Retrasarte siempre te hace ver como una persona poco organizada, irresponsable y que no respeta el tiempo de los demás. Si reconoces que te cuesta ser puntual, aplica estos seis consejos para solucionar tu problema y de paso aprovechar más tu tiempo.

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Agenda todo. Por suerte, ahora tenemos la facilidad de contar con herramientas electrónicas súper fáciles de usar para hacer esquemas. Así que busca la que mejor te vaya, organiza y calcula la hora en la que realizarás cada actividad, a modo de que tengas el tiempo suficiente para cada una.

Sincroniza tus relojes. Los relojes de tu celular, el de muñeca, de tu carro y del ordenador de tu computadora o tableta deben estar en perfecta sincronía. Las personas impuntuales suelen utilizan como excusa que cierto reloj está adelantado o atrasado para justificarse.

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Se realista. Todos sabemos que las reuniones del trabajo pueden alargarse más de la cuenta y que el tráfico tiende a ser demasiado pesado en ciertas horas, así que nunca hagas planes bajo la probabilidad de que tardes menos de lo estimado.

Establece tiempo para imprevistos. Si llegar al trabajo te toma 20 minutos, nunca salgas con los minutos contados. Debes establecer un margen de error de al menos 15 minutos para estar preparado por si se presenta algún imprevisto. En caso de que no pase nada, aprovecha ese lapso para alguna actividad provechosa mientras esperas.

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Deja todo listo el día anterior. Lo que sucede con dejar todo para último momento es que, con las prisas, puedes olvidar algo importante, tendrás que devolverte a buscarlo y te retrasarás. Preparar todo con antelación evita que eso pase y te ahorra muchísimo tiempo.

Olvídate de los “cinco minutos más”. Cinco minutos más en la cama pueden volverse 10, 15 o hasta media hora. Asegúrate de irte a la cama temprano y obtener sueño de calidad para que te levantes inmediatamente suene la primera alarma. Al principio será difícil, por lo que puedes empezar con programar dos alarmas más seguidas.

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