Qué diferencia a un virus de una bacteria
Cada uno de estos microorganismos tiene sus propias características
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En apariencia, tanto los virus como las bacterias parecen bastante similares, ¿no es cierto? Ambos son capaces de producir daños en nuestro cuerpo, causarnos enfermedades e infecciones. Pero realmente son microorganismos muy diferentes entre sí.
No todas las bacterias son malas
Esta pareciera ser una de las principales diferencias entre ambos tipos de microorganismos. Mientras que con los virus siempre habrá daños para la salud y provocan enfermedades, no todas las bacterias lo hacen. De hecho, muchas bacterias previenen enfermedades, ¿lo sabías? El principal ejemplo son las bacterias que mantienen el pH en el aparato digestivo y previenen infecciones.
Si es cierto que hay algunas bacterias patógenas que si provocan enfermedades, pero estas también pueden llegar cuando incluso la población de bacterias saludables se descontrola en nuestro cuerpo.
Pequeñísimos, pero no del mismo tamaño
Si bien ambos son microorganismos, las bacterias son aproximadamente 100 veces más grandes que los virus. Por esta razón, las bacterias pueden ser observadas en un microscopio óptico, mientras que los virus solo pueden ser observados a través de microscopios electrónicos.
Actúan diferente en nuestro cuerpo
Las bacterias ya están en nuestro organismo, pero el resto de ellas ingresan a nuestro cuerpo de la misma manera en la que los virus pueden hacerlo. Esto es a través de las vías respiratorias, heridas en la piel, picaduras de algunos insectos o por transmisión sexual.
Dentro de nuestro cuerpo, si vencen a nuestro sistema inmune, los virus dañarán o matarán a las células en las que se reproduce. Las bacterias, en cambio, consumirán los recursos de las células y depositarán sustancias tóxicas, conocidas como toxinas. Las infecciones por virus suelen ser sistémicas, las generadas por bacterias siempre iniciarán de forma localizada.
No se combaten de la misma manera
Ante ambos, nuestra principal defensa es nuestro sistema inmune. Si este falla o no es suficiente, para los virus necesitaremos antivirales, mientras que para las bacterias se utilizan los antibióticos. Hay vacunas para ambos, que básicamente ingresan microorganismos muertos o inactivos para que nuestro sistema inmune ya los reconozca y sepa actuar ante ellos cuando ataquen verdaderamente.
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