Así es como debes organizar tu ropa interior
¿El caos de tu cajón de ropa interior es tan grande que no sabes por dónde empezar? La organizadora Rossy Montás te dice qué hacer para pasar del alboroto al orden sin fracasar en el intento
Laura Ortiz Güichardo
Nunca encuentras ese sostén strapless o esa lencería súper sexy que solo usas ocasionalmente. Es más fácil comprar un par de medias nuevas que intentar encontrar la compañera perdida entre tanto desorden. Gran parte de tus bragas se han estropeado en el afán de forzar la gaveta para que cierre... Sí, todas estas son situaciones de la vida real con las que quizá te sientas identificada y ¿sabes cuál es la conclusión? ¡Tu cajón de la ropa interior necesita ser organizado de emergencia! ¿El caos es tan grande que no sabes por dónde empezar? Respira profundo y sigue leyendo, porque la arquitecta y organizadora profesional Rossy Montás, creadora de @organizar_up, te dice lo que debes hacer para pasar del alboroto al orden sin fracasar en el intento.
Deshazte de lo que no usas
¡No más caos! Así puedes lograr una despensa en orden
El primer paso para organizar tu ropa interior es clasificar las piezas que usas y las que debes desechar. Aunque es muy probable que todas las prendas que tienes guardadas te sirvan (razón por la que no has querido desprenderte de ninguna), debes admitir que hay muchas que nunca te pondrás, ya sea porque no están en las mejores condiciones, porque son incomodas o simplemente porque no te gusta cómo te quedan. Identifícalas y sácalas.
Cómo doblar y guardar
Camisetas. Si tienes espacio en los cajones, la recomendación es que guardes allí las camisetas y t-shirts. Para doblarlas, toma la camiseta y colócala con el frente hacia abajo. Procede a formar un rectángulo vertical, doblando las mangas hacia el centro. Luego, dobla llevando la parte inferior de la camiseta hasta arriba y vuelve a doblar dos veces hasta obtener un pequeño rectángulo, que puedes guardar de manera vertical en la gaveta. En caso de que prefieras colocarlas una sobre otra, solo dobla en dos, tipo regalo. Ten pendiente siempre estirar bien para que no se arruguen y tenerlas a la vista para que sea más fácil escoger.
Bragas y calzoncillos. Las piezas inferiores, tanto para mujer como para hombre, debes colocarlas con el frente hacia abajo para después llevar la parte de la entrepierna a la cintura. Luego, dobla cada lado hacia el centro sobre la parte de la entrepierna. Una vez hecho esto, puedes enrollar o dejar así para guardar en forma de paquete.
Sujetadores. Como estas son piezas que requieren de un cuidado distinto (para no estropear las copas o que se salgan los aros), deben guardarse de una forma distinta. ¿Cómo hacerlo? Colócalos abiertos en la gaveta de forma vertical, uno arriba de otro, con los tirantes hacia dentro igual que los laterales. Es un truco súper funcional que incluso aplican en las tiendas para poder sacar uno sin alterar el orden de los demás.
Medias. Existen varios métodos para doblar las medias. Si quieres tener tus cajones más organizados, la mejor opción, ya que ocupa menos espacio, es la siguiente: coloca una sobre la otra con los talones encontrados, dobla la parte de los dedos hacia dentro y une con el elástico para formar un pequeño paquete. En caso de que se trata de medias largas, sigue los mismos pasos, pero, en lugar de unir con el elástico, dobla en forma de rollito. Coloca en forma vertical en el cajón. Evita hacer bolas, ya que puede dañar el elástico. ¿Trucos para evitar que se pierdan? Ponlas en una red al lavarlas y lleva un control de tus medias: si se pierde o rompe una, deshazte de la otra o guárdala aparte para reciclaje.
En sentido general, Rossy considera que la mejor forma de guardar la ropa es de forma vertical, para evitar que se estropee y poder guardar un mayor número de piezas. A la vez, dice que colocarlas por colores es una muy buena idea, pues luce estéticamente más organizado además de que permite ver la cantidad de prendas que tienes de un mismo color.
Laura Ortiz GüichardoPeriodista de Revista. Me apasiona escribir sobre salud mental y relaciones de pareja. De no ser periodista, sería psicóloga con un blog.
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