La ropa que compras revela tu nivel de responsabilidad con el planeta
La evidencia es la nueva herramienta que introdujo la plataforma digital de moda de lujo Farfetch para hacer concientes a los compradores
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La industria de la moda avanza a pasos gigantes hacia la transformación y con ella la cultura de consumo. Los grandes de la industria han hecho tangible la idea ofreciendo prendas de vestir coherentes con su discurso de migrar a la reducción de la huella en el medio ambiente; por lo que el uso de vestimentas de segunda mano y recicladas es la tendencia que debería mantenerse hasta devolverle la estabilidad al mundo.
Entre las iniciativas más recientes está la herramienta que lanzó la plataforma digital de moda de lujo Farfetch, la cual permite a los compradores ser conscientes del impacto al planeta que provocan sus decisiones de consumo. En ella se pondera los materiales menos agresivos, pero también contemplar el ahorro de adquirir piezas pre usada.
La acción es parte del compromiso de esta empresa con la sostenibilidad y tiene el objetivo ayudar a que la gente piense, actúe y elija positivamente, gestionando a que se convierta en una cultura entre los consumidores.
La herramienta coincide con el lanzamiento de una nueva investigación, solicitada por Farfetch en asociación con QSA, ICARO y la London Waste and Recycling Board, que, entre tantas cosas, analizó los impactos medioambientales medios (carbono, agua, residuos) de los artículos de moda y las tasas de sustitución para ver hasta qué punto la compra de artículos de segunda mano sustituye a la necesidad de comprar artículos de nueva temporada.
"Los datos existentes muestran que la reventa de artículos de lujo representa un mercado de 24.000 millones de dólares estadounidenses que crece cuatro veces más rápido que el mercado primario del lujo, en parte debido al interés de los consumidores por la moda sostenible, pero los datos sobre el impacto medioambiental de la reventa son limitados”, expresó Thomas Berry, director de negocios sostenibles de Farfetch.
La compra de artículos de segunda mano puede ahorrar 1 kilogramo de residuos, 3.040 litros de agua y 22 kilogramos de dióxido de carbono.
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