Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Herramientas
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Reina Isabel II
Reina Isabel II

Gran Bretaña y el mundo se despiden de Isabel II

Gran Bretaña y el mundo se despiden de la reina Isabel II en un funeral de estado que reunirá a presidentes y reyes, príncipes y primeros ministros, así como a hasta un millón de personas en las calles de Londres para dar un último adiós a una monarca cuyos 70 años de reinado definieron toda una época

Gran Bretaña y el mundo se despiden hoy lunes de la reina Isabel II en un funeral de estado que reune a presidentes y reyes, príncipes y primeros ministros, así como hasta un millón de personas en las calles de Londres, para dar un último adiós a una monarca cuyos 70 años de reinado definieron toda una época.

La jornada repleta de actos funerarios en Londres y Windsor comenzó temprano cuando las puertas del Salón de Westminster se cerraron al público después de que cientos de miles de personas pasaran ante el ataúd desde el 14 de septiembre. Muchos de ellos pasaron frías noches al raso para presentar sus respetos ante el féretro de la reina, en una conmovedora muestra de duelo nacional.

“Sentí que tenía que venir y presentar mis últimos respetos a nuestra majestuosa reina, ha hecho mucho por nosotros, y (es) apenas un pequeño agradecimiento de la gente”, dijo Tracy Dobson, una de las últimas que se había sumado a la fila para ver el ataúd.

En un país conocido por la pompa y el boato, el primer funeral de estado británico desde el de Winston Churchill resultaba espectacular: 142 marineros de la Armada tiraron del carro de armas con el ataúd de Isabel hasta la Abadía de Westminster, mientras el rey, Carlos II, y sus hijos, los príncipes Guillermo y Enrique, caminaban detrás y sonaban las gaitas.

Después se llevó el ataúd a hombros a la Abadía, donde 2.000 personas, desde líderes mundiales a trabajadores de salud y voluntarios, se reunieron para recordar a la monarca. Antes de la ceremonia una de las campanas de la abadía sonó 96 veces, una por minuto, por cada año de su vida.

“Aquí, donde la reina Isabel se casó y fue coronada, nos reunimos desde todo el país, de la Mancomunidad y de las naciones del mundo, para llorar nuestra pérdida, para recordar su larga vida de servicio desinteresado y en segura confianza confiarla a la misericordia de Dios nuestro hacedor y redentor”, dijo el deán de la abadía medieval, David Hoyle.

El lunes ha sido declarado feriado nacional en honor de Isabel y cientos de miles de personas acudieron a Londres para verlo. Mucho antes del inicio del funeral, las autoridades londinenses dijeron que todas las zonas para presenciar la ruta del cortejo fúnebre estaban llenas.

Se esperaba que millones más siguieran el funeral en vivo por televisión, y la multitud acudió a parques y espacios públicos británicos para verlo en grandes pantallas. El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, señaló durante la ceremonia que “pocos líderes reciben el aluvión de amor que hemos visto” por Isabel.

La noche anterior, Carlos III dio las gracias a la gente y dijo que él y su esposa Camila, la reina consorte, estaban “enormemente conmovidos” por la gran cantidad de personas que habían acudido a despedirse de la reina.

“Mientras todos nos preparamos para decir nuestro último adiós, simplemente quería aprovechar esta oportunidad para dar las gracias a todas las personas que han sido de tanto apoyo y consuelo para mi familia y para mí mismo en este momento de duelo”, dijo en un mensaje.

Tras el funeral se celebrarían dos minutos de silencio seguidos por el himno nacional y una pieza de gaita, antes de que el ataúd se lleve en procesión, escoltado por unidades militares con traje de gala y sus hijos caminando detrás, al arco de Wellington cerca del Palacio de Buckingham.

Allí se colocará en un auto fúnebre que lo llevará a Windsor para otro cortejo fúnebre por el Long Walk, una avenida de cinco kilómetros (tres millas) hasta el castillo de la localidad, antes de una misa en la capilla de San Jorge. Después será sepultada junto a su fallecido esposo, el príncipe Felipe, en una acto familiar privado.

El centro de Londres ya estaba lleno antes del amanecer del lunes de gente que buscaba un sitio con buena visibilidad, y las autoridades advirtieron de grandes aglomeraciones.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, era uno de los líderes mundiales que presentaría sus respetos el domingo a la reina Isabel II, en una de las mayores reuniones de mandatarios producida en años.

TEMAS -

Noticias y servicios que extienden el alcance global de la cobertura basada en hechos