El ejército israelí ataca una escuela de la UNRWA en Gaza que ‘alberga una base de Hamás’
La UNRWA, que coordina casi toda la ayuda a Gaza, se encontró en el centro de una tormenta diplomática

El ejército israelí asume la responsabilidad de su operación. Su fuerza aérea llevó a cabo un ataque contra "una base de Hamás ubicada en esta escuela. Varios miembros de grupos armados palestinos (Hamás y Yihad Islámica), que participaron en la masacre del 7 de octubre, fueron eliminados", dijo el ejército israelí en un comunicado.
"Los aviones de combate del Ejército [...] llevaron a cabo un ataque preciso contra una base de Hamás dentro de una escuela de la UNRWA en la región de Nuseirat", afirmó el ejército israelí, añadiendo que "los terroristas dirigieron su campaña de terror desde el área de la escuela mientras la explotaban y la usaban como refugio".
Las imágenes de Gaza muestran una vez más escenas de caos, informa nuestro corresponsal en Jerusalén. Decenas de cadáveres alineados en el suelo, familias diezmadas, niños muertos, sobrevivientes llorando. Los heridos fueron trasladados a un hospital de campaña.
"Un número considerable de mártires y heridos siguen llegando al hospital de los mártires de al-Aqsa", ubicado en la ciudad de Deir al-Balah, cerca de Nuseirat, dijo el servicio de prensa de Hamás. Más temprano en la noche, el hospital dijo que se enfrentaba a una "falla de uno de sus generadores de energía", lo que podría complicar el tratamiento de pacientes vulnerables y causar "una catástrofe humanitaria".
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"El olor de la sangre"
Antes de este ataque, el hospital de al-Aqsa ya había recibido, desde el 4 de junio, "al menos 70 muertos y más de 300 heridos, en su mayoría mujeres y niños, como resultado de los ataques israelíes en las zonas centrales de la Franja de Gaza", según Médicos Sin Fronteras (MSF). El olor a sangre en la sala de emergencias esta mañana era insoportable. Hay gente tirada por todas partes, en el suelo, fuera. Los cuerpos fueron traídos en bolsas de plástico. La situación es insostenible", dijo en X Karin Huster, coordinadora de MSF para Gaza.
Hace unos 10 días, un ataque aéreo israelí contra un campamento de desplazados en la región de Rafah dio lugar a las mismas escenas de devastación. Israel reconoció "un trágico accidente" y anunció que estaba "abriendo una investigación". Este jueves, no hay necesidad de investigar. El ejército dice que ha tomado una serie de medidas para minimizar las bajas civiles, pero los palestinos denuncian "una horrible masacre".
La UNRWA, que coordina casi toda la ayuda a Gaza, se encontró en el centro de una tormenta diplomática y al borde del colapso después de que Israel acusara en enero a una docena de sus 13,000 empleados en Gaza de estar involucrados en el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023.
Esto ha llevado a muchos países, incluido Estados Unidos, el mayor donante, a suspender abruptamente la financiación de la agencia, amenazando sus esfuerzos por entregar ayuda a Gaza, aunque varios Estados han reanudado los desembolsos desde entonces. El jefe de la UNRWA, Philippe Lazzarini, exigió a Israel que detenga "su campaña" contra su agencia, en un artículo de opinión publicado el viernes pasado en el New York Times.