La burla

La economía está lenta (seamos cautos con los adjetivos) y el tema de Odebrecht sigue sin resolverse. Dos factores que hacen que hablar de reelección y cambios en la Constitución sean un insulto a la inteligencia de los ciudadanos de este país.

En el 2020 habrá un cambio generacional en la política dominicana, adelantan algunos de los protagonistas. La pregunta es si los dinosaurios llegarán a esas elecciones y se irán después (pierdan o ganen) o si ya no llegarán como candidatos, reales o enchufados... ¿Tenemos relevo, se lo ha trabajado y ganado?, ¿los enquistados van a dejar paso libre en sus partidos? La edad no es el único factor, (ni siquiera el más importante) de ahí que sea mejor hablar de grupo de relevo que de generación de relevo. No es más recomendable un inadecuado de 30 años que uno de 60. El problema es exactamente el mismo.

Es más... ¿quiere el votante un nuevo estilo de política o sigue aferrado a la fundita/tarjeta/nominilla impidiendo cualquier intento de regeneración que algún político inspirado pudiera intentar?

No hay suficiente dinero en la calle. Y eso es más urgente que empezar a elucubrar, intoxicar, despistar, marear, manipular con el tema de la reelección.

Hoy por hoy, LOS temas son el caso Odebrecht y la ralentización de la economía. Las expectativas de menor crecimiento y la deuda que hay que pagar en dólares. Y la lucha contra la impunidad, siempre.

La Corporación (órgano morado anteriormente conocido como el Comité Político del PLD) debe dejar de jugar con los ciudadanos y empezar por depurarse a sí misma. Si quiere ser opción de poder en el 2020 aún tiene mucho trabajo por delante. Y menos dinero.

IAizpun@diariolibre.com

Inés Aizpún