El gobierno que soñó...

Llegó la hora de las sugerencias al presidente electo.

Ahora, todo el mundo le propone cómo obrar desde la Presidencia, cuáles medidas tomar, a quien designar en las diferentes posiciones del Estado, en fin, cómo hacer para lo que fue elegido, siguiendo los dictados de otros que no lo fueron.

Robándole la frase a un amigo, debo pedirle al presidente electo que haga el gobierno que soñó desde niño o, al menos, el que soñó su padre.

Ese gobierno, por supuesto, estará matizado por la grave crisis de salud y económica que estamos padeciendo, pero en términos de escoger al personal que lo acompañará en su gestión debe seleccionar a los hombres y mujeres que conoce y que conocen su modo de pensar. De ninguna manera puede inventar con personas de dudosa lealtad, que juegan para ellas mismas y que han creado una imagen de eficiencia a base de jugar con la credibilidad de nuestra gente.

Debe recordar que su compromiso es con el país, no con dirigentes de dudoso currículum que puedan afectar su disposición al bien común.

Sus pasos deben ser firmes, pero serenos. El presidente electo conoce mejor que nadie a lo que aspira este noble pueblo y debe hacer lo que le aconseje su conciencia, porque como dijo John F. Kennedy, “un hombre hace lo que debe hacer, a pesar de las consecuencias personales, a pesar de los obstáculos, los peligros y las presiones, y esa es la base de toda moralidad humana”.

El país entero quiere que Luis Abinader tenga éxito en el ejercicio de su presidencia, porque sería para beneficio de todos. Dejémoslo que haga su trabajo.

Adriano Miguel Tejada