Las crisis en el PLD

El Partido de la Liberación Dominicana nació de una crisis y ha vivido en constantes crisis hasta su llegada al poder.

La diferencia fundamental entre aquellas crisis, que podemos llamar “históricas” y las que ha padecido desde el 2007, es que las “históricas” culminaban siempre con la renuncia o expulsión de dirigentes importantes de la organización, mientras que las modernas se han resuelto con cargo al presupuesto nacional.

El PLD histórico se nutrió de numerosos dirigentes de izquierda, algunos de los cuales fueron entrenados en el exterior en guerrilla urbana, o formaban parte de la “izquierda académica” aposentada en la Universidad Autónoma de Santo Domingo. De estos grupos surgieron las primeras rebeliones contra el líder Juan Bosch.

Cinco años después de fundado surge la crisis de las elecciones de 1978, en la que sale el primero de los dos secretarios generales que se vieron forzados a abandonar el partido.

Otra característica de estas crisis “históricas” es que prácticamente todos los dirigentes expulsados o renunciantes volvieron al partido, y/o ya en el poder, recibieron un cargo público, aquí o en el exterior.

Ahora bien, la crisis que comenzó en el 2007 fue de factura diferente. Ya el PLD no tenía un líder, pues Bosch había fallecido unos años antes y tampoco era, al principio, una pugna por el liderazgo en el partido, aunque por la dialéctica inevitable de las cosas devino en eso. Era simplemente, una lucha por el poder, resultado de una mezcla de coyunturas históricas y acuerdos verbales...

Pero eso es otra historia...

Adriano Miguel Tejada