Las FARC, sus armas y el lenguaje

Dos titulares sobre el mismo hecho. “Las FARC anuncia retorno a las armas.” Es de AP, la Associated Press. Y el de la agencia EFE: “Iván Márquez, rostro de las FARC en diálogo de paz y de la nueva disidencia.”

Este segundo es intencionadamente confuso y lava la imagen de un terrorista arrepentido... pero no de haber matado, sino de haber dejado las armas.

Las palabras importan, la corrupción comienza con la corrupción del lenguaje, explica Luis García Montero en un acertado artículo en la sección Librotea de El País.

Por mucha ideología que se comparta, dar la categoría de “rostro de la paz” a un asesino en serie o en masa, confeso y dispuesto a seguir matando, raya en lo obsceno. Una parte de las FARC vuelve al terrorismo; no retorzamos las palabras.

El lenguaje importa. Tanto como para que el susodicho Márquez aclare que renuncia a lo que él llama retenciones con fines económicos porque sabe que la palabra secuestro no gusta. Probablemente renuncia a ellos porque todavía no tiene la capacidad operativa que exige este tipo de tortura, que en el caso de las FARC duraba años.

Disfrazamos la realidad que no nos gusta modificando las palabras para hacerla más digerible. Tergiversando las palabras alteramos la realidad.

Y estamos en campaña, escenario perfecto para la floritura en el discurso. Ellos inventaron el lenguaje de lo políticamente correcto que ya invade todo. Para un político en campaña todo es una oportunidad o un reto, algo emocionante que les infunde de una aureola de triunfo.

Nunca usarán el término problema... porque tendrían que ofrecer la solución.

Inés Aizpún

Inés Aizpún es una periodista dominicana y española. Actualmente es la directora de Diario Libre. Ha recibido el premio Caonabo de Oro, el Premio de la Fundación Corripio de Comunicación por su trayectoria, y el premio Teobaldo de la Asociación de Periodistas de Navarra.