Los dominicanos y la sofrosine

Me han enviado un artículo de Francisco Rodríguez, publicado en un diario español, que hago mío, un fragmento del cual comparto con todos.

Si preguntamos a la gente si saben lo que es la sofrosine seguramente pensarán que se trata de algún medicamento. Algunos quizás sepan que se trata de un término griego que significa la templanza, la moderación, el dominio del espíritu sobre el cuerpo, es decir el autodominio de las propias pasiones, el honesto vivir que dirían los romanos. Que el espíritu domine los instintos y frene las pasiones sería la realización de la sofrosine.

No es raro que el término resulte desconocido para la gente, ya que llevamos varias generaciones en las que no se educa a la juventud para la moderación y la templanza, sino para el goce y disfrute de los placeres sin límite ni responsabilidad.

No dudo que haya un sector que cultive su espíritu y domine sus pasiones, pero lo que predomina en el ambiente es lo contrario. Dominarse a sí mismo, para llevar una vida honesta y austera, se considera una estupidez para los que han ido creciendo en la satisfacción de sus caprichos, en la exaltación de todos los placeres.

La distinción en cada uno de nosotros del cuerpo formando parte de la naturaleza y del espíritu del mundo de los valores, de la verdad, del bien, de la libertad y la necesidad de armonizarlos para que sea el espíritu, y no la ciega naturaleza, quien rija nuestras vidas, apenas sí merece atención.

Mientras tanto ... nadie se ocupa de una educación capaz de hacer personas que sometan su cuerpo a su espíritu, sus pasiones a la razón, capaces de amar y respetar, de establecer relaciones sólidas, de crear una familia, de ser padres y madres y no simples juguetes sexuales.

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Adriano Miguel Tejada