Ataque a turistas

Si de verdad queremos que este país se vaya por el derricadero de la pobreza y el descrédito internacional, sólo tenemos que dejar que continúen como avalancha los ataques a turistas para robarles.

En el último de los ataques, en la zona del Este, la mayor en cuanto al número de turistas que acoge, un ciudadano suizo fue herido de bala mientras trataba de defender a su esposa del asalto de los jóvenes.

El turismo dominicano tiene ya demasiados problemas para que se permita que la delincuencia común y barata le dé el golpe de gracia.

Si queremos, como ha prometido el presidente Medina, lograr altas metas en la atracción de turistas a nuestro país, debemos garantizar la integridad física de los visitantes. Ahí no hay pero que valga.

Por tanto, corresponde a las autoridades actuar con la debida diligencia para que nuestras áreas turísticas sean verdaderos centros de esparcimiento y no parte de la selva en que se ha convertido nuestro país.

Diario Libre