Que las medidas no se las lleve el viento
Han presentado viejos remiendos como nuevos
Diferentes administraciones gubernamentales siempre han apelado a la práctica de acelerar medidas cuando la ciudadanía no les saca el guante por políticas impopulares o desaciertos como los cometidos por la Policía Nacional contra ciudadanos que han sido víctimas de acciones brutales como también del uso excesivo de la fuerza.
En estos últimos casos, siempre ha salido a relucir la reforma policial, a la que algunos sectores califican como simples remiendos, mientras otros plantean posiciones más radicales como la disolución no solo del cuerpo del orden, sino también de su sede central por ser un símbolo de la dictadura trujillista.
Luego de las muertes de tres jóvenes tras estar detenidos en destacamentos de Santiago, San José de Ocoa y el Distrito Nacional se anunciaron como nuevas, medidas que en otras épocas ya han sido planteadas.
Ayer ante la necesidad de bajar la indignación de la ciudadanía se anunciaron 14 acciones que se ejecutarán para “acelerar” la transformación de la Policía Nacional, que la gente ve con escepticismo, porque no ha sido una ni dos veces que esas promesas de cambio se las ha llevado el viento y los desmanes policiales continúan su agitado curso.
