Aquí, los delitos no tocan al Presidente

No se suscita como un problema de derecho comparado ni de legislación contraria o parecida, pero en el caso Odebrecht los opinantes quieren procedimientos parecidos.

La pregunta frecuente y cotidiana: ¿por qué aquí no?

Si en Perú o Ecuador o Argentina o Colombia se aprieta a la empresa brasileña hasta que bota aceite, no se explica que en Dominicana se actúe con tantas contemplaciones.

Igual delito, igual persecución. Si el reclamo es uno, el resultado no puede ser otro. Sin embargo, depende, pues como diría un comediante, no somos locos.

En Perú, por ejemplo, se quiere preguntar a los tres últimos presidentes: A Toledo, a García, a Humala, sin discriminación. Juzgar el pasado y no sólo el presente.

El procedimiento debiera ser igual de bueno para todos, incluyendo aquí, pues los contratos y las obras cubren más de una administración.

Eso pensó el burro, y lo corrigió el aparejo. La doctrina al uso es otra: lo que hiciera un funcionario no implica al mandatario, sea Hipólito, Leonel o Danilo.

Jurisprudencia genial. Si se saca del globo el 2020, la lotería puede seguir y con seguridad el premio se quedará en taquilla.

Diario Libre