Buscan votos y recursos en Nueva York

Los políticos dominicanos, cuando no van a Nueva York, mandan. No hace mucho estuvo Leonel, muy poco Hipólito y ahora va Quique.

Miguel anduvo, pero más como canciller que como PRD. Danilo también, pero en huida, pues no le luce prometer y hay compañeros esperando turno. Todos van a lo mismo, y todos afirman que les va bien y casi todos visitan al reverendo, pues allá Dios está después de sus santos.

Cada experiencia es interesante, y se da el caso de los que se mudan como Leonel por una o dos semanas, pero también los que van por dos días como Hipólito. Cada partido tiene sus dificultades y salen a flote o se agudizan cuando reciben visita de Dominicana, y al que no sepa manejarse, lo abruman con chismes. No es fácil nadar en dos aguas, y a veces hasta en tres, y todavía menos bañarse y guardar la ropa. Aunque el punto más crucial son los locales donde se realizan los actos, pues según el tamaño se calcula la asistencia.

La policía, los bomberos y los interesados conocen la capacidad de cada lugar, y el que da un número que no es, queda en falta. Cuentan que es mucha la vergüenza ajena.

Diario Libre