El cambio a lo joven en Moderno...

Los críticos del PRM se afanaron desde su fundación en buscar los elementos modernos, y la verdad que no los encontraron.

Vino viejo en odres usados.

Como el partido se creó corriendo, y había que seguir corriendo porque las tareas inmediatas imponían carrera, ese aspecto no provocó la mayor preocupación. Calco del PRD, en ocasiones el lápiz se salía de la línea y parecía una caricatura de periódico, cuya finalidad siempre será burlar la realidad.

La situación podría cambiar si lo que se rumora es verdad: que habrá gente nueva en todas las secretarías. Si acaso sobrevivirá Deligne Asención en Organización.

A Licho Matos le dieron “rilís” en Comunicación, y entendió el proceso pues no chistó, aunque prefiere la palabra relevar y no la expresión soltar en banda.

Ahora ocupará ese cargo Elizabeth Mateo, quien dejó de estar harta y se acomodó al sistema. La bendición no le cayó del cielo, sino que fue obra de su madrina Carolina Mejía.

Parafraseando a Lama de años atrás, en el PRM no están barriendo los precios, sino los viejos. Cuando se publique la lista, el llorar será un canto antiguo.

Se quería Moderno, pero ahora se quejan de que no tanto.

Diario Libre