El tránsito sigue igual de infernal

Las promesas de mejoría en el flujo vehicular en el Gran Santo Domingo siguen sin ser cumplidas.

Luego de mucho cacareo y anuncios de grandes planes con bombos y platillos, lo cierto es que el tráfico sigue igual de infernal.

El experimento con los camiones se notó los primeros tres o cuatro días, pero los funcionarios sucumbieron a la presión y a los intereses y, a la larga, se le dio permiso a medio mundo para que los vehículos pesados circularan como siempre por las calles capitalinas.

Una propuesta para alterar el sentido en varias de las principales arterias de la capital se quedó ahí, a nivel de propuesta, porque los dueños de negocios pidieron pruebas y no se pudo mostrar ningún estudio que avalara la iniciativa. Este tema del tráfico y los tapones es muy viejo. Siempre se habla de posibles soluciones, todos queremos que se resuelva, pero ninguno quiere cargar con el sacrificio que conlleva que las medidas se concreten.

Así que mientras nadie quiera ponerle el cascabel al gato y ganarse mucha impopularidad por las medidas que haya que tomar, lo que toca es chuparse los tapones a toda hora o sólo salir de la casa de madrugada, con riesgo de ser atracado.

Diario Libre

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