Una democracia vestida de celofán...
Sus desnudeces se ven a millas de distancia...
Diario Libre
La democracia dominicana anda de cabaret en cabaret, como turista en su propia tierra, y los partidos, como bailarinas de tubo, con poca ropa.
El PRM intenta confirmar las actuales autoridades del partido, unas autoridades que llegaron a esas posiciones por el método infamante del dedo. Nada de democracia para qué te tengo.
Moderno no se atreve a someter a escrutinio los puestos de dirección, pues como burro que corcovea mucho, teme que de brinco en brinco la carga se vaya al suelo.
El PLD todavía peor. No puede realizar una reunión del que se supone su organismo superior (en cuanto al día a día), y la casa cogiendo fuego, o por falta de manguera y agua o por no llamar a los bomberos.
La Ley de Partidos pinta de colores, y ya se verá, cuando sea, lo de peine en cabello malo. Todos dicen que quieren pelo bonito, pero sin aguantar jalones.
Si el PLD y el PRM dan el mal ejemplo ¿qué puede esperarse de los otros, de los chiquitos, que no tienen ni amparo?
¡Ah democracia, no te salvan ni con sobornos!
Diario Libre
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