“La UASD debe modificar la forma en que maneja y selecciona sus autoridades”

SANTO DOMINGO. Tres exrectores de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) coinciden y abogan por un nuevo liderazgo en la academia, para sacar el clientelismo político y la inestabilidad docente, entre otros males, que la tienen sumergida en el deterioro.

Los médicos Fernando Sánchez Martínez y Julio Ravelo Astacio y economista Porfirio García Fernández dijeron, por separado, que para romper con el desorden, generado por gremios y directivos, se debe modificar la forma en que la universidad se maneja desde el punto de vista de la selección de sus autoridades.

Sánchez Martínez, quien fue rector en el período 1984-1987 y ahora es miembro de la comisión electoral de la UASD, dijo que ojalá se aprovechen las elecciones del 20 de junio de este año para iniciar esos cambios.

“Evidentemente que hay que buscar una salida, la universidad no puede seguir arrastrando esta situación de inestabilidad, de suspensión de docencia que altera totalmente su misión académica de docencia, investigación y servicios”, comentó.

En su opinión, lo principal es modificar la forma en que la universidad escoge a sus autoridades, porque se ha convertido en el transcurso de los años en clientelismo político y oportunismo personal, donde lo que prevalece es el hacerse el más generoso y simpático para lograr los votos en las diferentes instancias, pero sobre todo, en la rectoría y vicerrectoría.

“Es una situación que ha llegado a niveles que no es posible seguir tolerando, como por ejemplo: que personas penetren en la dirección de la UASD y se aprovechen de esa situación porque respaldaron económicamente a tal o cual gestión”, comentó.

Ravelo Astacio

El exrector, al que le tocó dirigir los destinos de la UASD en el período 1990-1993, cree en el cambio y confía en las capacidades de las personas de hacer los ajustes que se necesitan para que la academia tenga buenos gerentes.

Para Ravelo Astacio es necesario poner un alto a la situación que se viene dando en la universidad, que va en desmedro de más de 185 mil estudiantes que dependen del futuro de esa institución.

“Para romper con el desorden, generado por gremios y directivos, se debe apelar a un nuevo liderazgo. La UASD no tiene que ser contestataria del Gobierno en todos los aspectos, puede contribuir a las políticas nacionales sin perder su criterio crítico y que hay que procurar que el Gobierno se comprometa con la universidad”, subrayó.

Dijo que la parte del clientelismo depende mucho de la actitud del rector de turno.

García Fernández

Este exrector plantea “mirar hacia adentro”, dejar a un lado los aspectos del “grupismo” y pensar en el rol que debe jugar y fortalecerla para el país.

A García Fernández le tocó dirigir la UASD del 2002 al 2005 y para él, el problema no es pensar en elecciones, sino en lo que hay que hacer para avanzar como academia y para eso se debe cambiar la estructura y buscar la integración de la familia universitaria para fortalecerla.

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Lisania Batista