Ligia Minaya

La destacada escritora y colaboradora de este diario, Ligia Minaya, se fue a su tierra natal de Moca, a encontrarse con sus ancestros.

Se fue de la vida con la soledad que fue su compañera durante sus últimos años de paso por esta tierra.

Abogada de la primera promoción de derecho de la Universidad Católica Madre y Maestra, llegó tarde a las letras pero dejó una impronta en la literatura dominicana reconocida por todos.

Comenzó a escribir para diarios en la década del 1980. Fue colaboradora de la revista Mujer Única. Dos de sus obras fueron premiadas en el año 1998 y ganó el Premio Nacional de Cuento en el año 2000. Sus obras en prosa, “No lo hice por maldad” y “El fuego sagrado del hogar”, fueron traducidos al italiano.

Nadie amó como ella su pueblo natal y nadie quiso tanto como ella un mejor porvenir para el pueblo dominicano. Sus artículos en Diario Libre reflejaban una labor de magisterio de ciudadanía para crear una sociedad más humana y más justa para todos.

Al marcharse, deja un vacío que no lo llena el aire, como escribió el poeta.

Hasta luego, ciudadana ejemplar.

Diario Libre