Mal argumento

Se escucha, sobre todo en las redes sociales, la queja de que el Poder Legislativo no es independiente y que sus decisiones dependen del partido de Gobierno.

La verdad es que así es como funciona la democracia representativa basada en partidos políticos.

La oposición, que critica cuando los legisladores del partido de Gobierno votan en bloque, olvida que ella también tiene sus bloques que votan en la forma en que lo ordena su partido.

Esto no es más que un argumento para masas que no entienden cómo funcionan los sistemas políticos, pues, a pesar de que las constituciones de los Estados establecen la libertad de voto en los parlamentos, la realidad es que los legisladores, con excepción de los asuntos de conciencia en que son dejados libres por sus organizaciones, siempre votan bajo el mandato de sus partidos, que son los que los postulan.

Todos tenemos la obligación de colaborar para lograr una ciudadanía mejor informada y no jugar con la ignorancia de la gente. Los argumentos ridículos conducen al desprestigio de quien los enarbola. Hagamos las cosas mejor.

Diario Libre