Qué hacer con La Victoria...
La Penitenciaría Nacional de La Victoria es un signo de oprobio que, no obstante, debe tener un uso adecuado en favor de la comunidad y de la memoria histórica dominicana.
Que no le pase como al ominoso centro de torturas de La 40, que fue destruido para que nadie recordara la ignominia y los crímenes que se cometieron allí.
En el actual emplazamiento se puede instalar un centro de Infotep para entrenar a los jóvenes de la comunidad y una escuela de arte, así como un museo para que el pueblo nunca olvide los miles de dominicanos que fueron torturados y encarcelados por luchar en favor de la libertad de este pueblo.
Este patrimonio horrendo debe ser convertido en un homenaje a la nueva República Dominicana que aspira a ser un Estado Social y Democrático de Derecho promoviendo el conocimiento, las artes, el deporte y que, al mismo tiempo le recuerde a la juventud dominicana tiempos que no pueden volver a repetirse en esta Patria.
El nuevo Gobierno tiene ahí una oportunidad de ir creando la nueva conciencia democrática nacional.