Celebración de mis cincuenta años de graduación

Hoy sábado con alegría y mis mejores recuerdos celebraré mis 50 años de graduada como abogada en la Madre y Maestra con un grupo de jóvenes, hombres y mujeres, a quienes quiero como hermanos. Junto conmigo estaban: Mercedes María Estrella, Cunqui Cabrera, Nelfa Ferreras, María Ela Ramírez, Dulce María Días, Rafa Cáceres, Bernabé Betances, Luis Mora, Gustavo Vega, Juan Guillermo Franco, José Ramón Ventura, Rubén Darío Espaillat, Ervin De León, y a los que Dios mandó a buscar: José María Hernández Espaillat, Antonio Aquino, Máximo Rodríguez, Lorenzo Rodríguez, Ramón García Gómez (El Wacal) y Ricardo Almánzar.

La Universidad Madre y Maestra, hoy la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, comenzó su nacimiento educativo en la calle Máximo Gómez esquina Sully Bonelli, en Santiago, en una casa prestada por la Familia Tavares, en la que en dos habitaciones se iniciaron las facultades de Derecho y de Educación, y en esa otra facultad estaban dos mocanas: Sasa Cabrera y Mary Lugo, además de dos o tres monjas de Santiago.

Luego al subir las inscripciones y agregar Ingeniería y Electromecánica, se trasladó a un espacio del Politécnico Nuestra Señora de las Mercedes y de ahí fuimos a donde ahora está (en Santiago) la PUCAMAYMA, que ha crecido como un mar de colores y sus aguas hoy cruzan por los jardines de todos sus alumnos. Ese edificio, que hoy es enorme, nos hace recordar un hermoso pasado. Monseñor Hugo Polanco Brito fue el primer rector.

Recordar mis días de estudiante de Derecho me llena el corazón, la mente y el alma de lo mejor que ha pasado en mi vida y de las amigas y amigos que hoy son mi “siempre”. Yo, que era maestra en Moca, al graduarme de abogada llegué a ser asistente del Fiscal Julio Ibarra Ríos (QEPD) y de ahí pasé a ser Fiscal en San Pedro de Macorís y volví a la capital a ser Juez de la 4ta. Cámara Penal y seguí y seguí con mi abogacía hasta hace pocos días. Es mucho lo que cuento, pero seguiré contándoles qué hicimos el día de mi graduación, en mi próximo artículo en DL.

Ligia Minaya