Desposorio de la Virgen y San José

Hoy, 26 de noviembre se celebran los “cuchumil” años de esa boda. Jesús nació un 24 de diciembre. ¿Del mismo año de la boda de sus padres o años después? Si nació ese mismo año, ya María estaba embarazada. Si nació varios años después de ese evento, ya tendría uno o varios hermanos. Nadie, entre los cristianos, evangélicos, católicos, dice que Jesús tuvo hermanos, sino que fue la “virgen” que salió embarazada por “obra y gracia del Espíritu Santo”. Yo respeto esas creencias. Pero la realidad dice otras cosas que no son inconvenientes, ni ofensivas, ni para María, ni para José, ni para Jesús, ni para nada, ni para nadie. Se sabe que la primera esposa de San José murió y dejó varios hijos en manos de su padre. Él, obligatoriamente, como lo indicaba el tiempo y el lugar en que vivía, debía casarse con una hermana de su fallecida esposa. ¿Era María esa hermana? Las religiones, los sacerdotes, las monjas, los creyentes, ni la Biblia, dicen nada de eso. ¡Está bien... yo lo respeto! Pero... ¿por qué no decir y predicar lo que en realidad pasó en aquellas vida de sabor a luces y flores, cubiertas de amor y respeto?

Yo imagino a María casada con Pedro y a Jesús rodeado de sus hermanos mayores y menores, pero no tengo ni ideas lejanas cómo se hacía un matrimonio de pobres en esa época. Jesús nació y creció dentro del judaísmo, pero dentro de esa misma creencia religiosa lo apartaron porque decían que el actuaba de otra formas y creencias. ¡Sabrá Dios...! Y es lo mismo que ahora sucede al despedirse hacia otro camino de los que eran sus “hermanos religiosos”, y forman otra religión. Hay católicos, cristianos, evangélicos, etc., cuyas religiones son fundadas dentro de la misma creencias en Jesucristo pero con otras formas y maneras. Para todos, Cristo, es el Hijo de Dios, hecho hombre, según la teología cristiana.

A mí lo que me gusta, y respeto, ha sido el desposorio de María con José, y hoy hay que celebrarlo. Yo me tomaré, como siempre, un cafecito con María y luego, por la tarde, una copita de vino junto a ella y a José. Celebrar un aniversario de matrimonio es lo bueno y lo correcto. Habrá quienes hoy vayan a la iglesia escuchar la misa, prender una vela ante la imagen de María y ver con cariño a José, y pedirle a Jesús que conserve su salud, y así pedidos y pedidos. Lo importante de respetar el derecho, es la paz. Crea lo que se crea, siempre que sea armonioso, ordenado, dulce y correcto. Felicitaciones María y José, en sus muchos años de matrimonio.

P.D: Pero ahora con dolor sabemos que hay Cardenales en contra del Papa Francisco a quien lo acusan de hereje. ¡Válgame Dios...!

Ligia Minaya