Sin fiel en la balanza
Las elecciones próximas no despiertan muchas emociones en la población, al limitarse a una contienda de sólo dos con posibilidades, uno de ellos amplio favorito. Las del 2000 fueron las últimas con una tercera figura, me refiero a Balaguer, en condiciones de ser el fiel que podía inclinar la balanza hacia un lado u otro. En 1996 hubo un escenario similar, y el peso fue a dar donde Leonel. Un tercero que favorezca a uno u otro, o que perjudique a los dos, condimentaría estos comicios un tanto desabridos.
Nelson Rodríguez
Nelson Rodríguez