Un mundo bastante raro

El mundo raro que pintó con sus versos la canción de José Alfredo Jiménez era un mundo en el que supuestamente no se sufría, se triunfaba en el amor y nunca se lloraba, bastante parecido al mundo light en el que ahora vivimos, donde si se sufre por algo es en las redes, y casi siempre por lo que sucede lejos de nuestro entorno, pero se ignora el dolor del semejante que está más cerca o solamente se lo tiene en cuenta como algo pasajero. En ese mundo light los desastres naturales son espectáculos mediáticos; se transmite durante horas por televisión la búsqueda de una niña que no existe, los famosos lloran ante las cámaras y prometen donaciones, pero a los pocos días el show cambia de tema y entonces desaparece esa solidaridad y solo queda la otra, la verdadera, la de la gente que ayuda en el terreno de los hechos, y que ninguna cámara registra. (Colaboración de Santiago Almada)

Nelson Rodríguez

Santiago Almada