Un cura disgustado y agradecido
Fray Kelvin Acevedo, de la iglesia Las Mercedes de la Ciudad Colonial, no estaba de buen humor en la misa del PRM para conmemorar el aniversario de la muerte de Peña Gómez. Sólo se notó de buen ánimo cuando agradeció el aporte de ese partido para tapar una gotera. A partir de ahí fue puro fuego, porque dijo prostitutas y “prostitutos” dejan sucio el frente del templo y lleno de botellas vacías por la bebentina nocturna. Hasta Patrimonio Cultural fue víctima de su látigo verbal por el color de la pintura de la iglesia.
Diario Libre
Diario Libre