Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Crisis griega
Crisis griega

Por la crisis, se complica sostener un negocio en Grecia

El país ha dependido del dinero extranjero para saldar sus deudas

Expandir imagen
Por la crisis, se complica sostener un negocio en Grecia
Unas personas observan los titulares de la prensa en un kiosco en la plaza Omonia de Atenas, Grecia, el 23 de julio de 2015. (AP/GIANNIS PAPANIKOS)

Los locales vacíos son otra vez un rasgo característico de los pueblos y ciudades de Grecia en medio de una crisis que pone en duda el futuro del país en la zona euro.

Esto empeoró después de que a finales de junio el gobierno impuso una serie de estrictos controles al retiro de dinero en los bancos, con un límite diario de 60 euros (64 dólares) en los cajeros automáticos. Aunque los bancos reabrieron esta semana por primera vez en casi un mes, el límite a los retiros sigue sin cambios y el efectivo se vuelve escaso.

Para una economía donde los pagos en efectivo son la norma, ese es un problema.

En Koukaki, a unos 2 kilómetros (1,2 millas) al sur del centro de Atenas, el mecánico Giorgos Prasinoudis, de 65 años, está disgustado.

Su esposa e hija de 11 años ya se mudaron a Alemania, irónicamente el país al que muchos culpan por los problemas económicos y sociales que aquejan a Grecia.

Expandir imagen
Infografía
Un anciano observa los números ganadores de la lotería en un local en Atenas, Grecia, el 23 de julio de 2015. (AP/GIANNIS PAPANIKOS)

El miércoles se sentó a beber un café afuera de su tienda de reparación de motocicletas, donde hay un letrero de “Se vende” en la ventana. Prasinoudis cerró su tienda después de 32 años.

“Es el fin para Grecia. No nos recuperaremos en 50 años”, dijo. “El país pidió mucho dinero prestado, los que se beneficiaron ya se fueron del país y la gente ordinaria tendrá que pagar la cuenta... espero que mi hija aprenda de Alemania y no regrese. Ni siquiera en un día festivo”.

Prasinoudis es una de las incontables víctimas de la crisis económica de Grecia. Tras quedar fuera de los mercados internacionales de crédito en 2010, el país ha dependido del dinero extranjero para saldar sus deudas a cambio de estrictas medidas de austeridad como recortes al gasto e incremento de impuestos.

Sin embargo, el costo ha sido enorme.

Desde entonces se han perdido un millón de empleos, la mayoría en el sector privado, alrededor de una quinta parte de la fuerza laboral del país. El dato más reciente muestra que el desempleo es de 25% y de más de 50% para los menores de 25 años.

Además de los controles de capital, el gobierno impuso una nueva ronda de medidas de austeridad subiendo los impuestos y aranceles a las empresas, mientras que mantuvo los gravámenes a la vivienda que se comen los ingresos de los hogares.

A dos calles del local de reparación de motos, Costas Kitsos, dueño de una tienda de artículos de computación, dice que las ventas se han desplomado desde que se impusieron los controles de capital el 29 de junio.

“La gente viene a la tienda, pregunta precios pero no compran nada... Todos temen gastar dinero porque no saben lo que pasará”, agregó.

TEMAS -