VIDEO | Servicios sanitarios que cambian vidas de escolares
Atención integral Inabie, que incluye salud auditiva, visual, bucal y epidemiológica, busca mejorar el rendimiento escolar
Para Isaurys Ventura, de 14 años, recibir sus auxiliares auditivos bilaterales le ha cambiado la vida para bien.
¿La razón? Ahora su rendimiento escolar es mucho mayor, su ánimo también ha mejorado y como puede escuchar bien “tiene más amiguitos”. Así lo manifestó a Diario Libre su madre, Carmen de la Rosa.
La joven cursa el segundo grado de secundaria en el Instituto de Ayuda al Sordo Santa Rosa, ubicado en el sector El Millón, y recibió sus auxiliares auditivos hace un año. “La vida le ha cambiado para bien. La niña ha podido avanzar en la escuela. Ahora ha evolucionado más. Tiene más amiguitos. Está socializando”, expresó su progenitora.
De la Rosa está muy agradecida porque sabe que esos aparatos son “muy caros” y que no podría adquirirlos por sus propios recursos.
Isaurys se encuentra entre los escolares beneficiados de los 108 auxiliares auditivos (unilaterales y bilaterales) entregados gratuitamente por el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie) en enero pasado, cuando reanudaron sus servicios de salud gratuitos, a causa de la pandemia del COVID-19.
Para el Inabie, los servicios de salud visual, auditiva, bucal y epidemiológica son relevantes porque contribuyen a mejorar el rendimiento de los alumnos. Así lo entiende la doctora Ruth Cairo, encargada del Departamento de Gestión de Salud, quien detalló que a través de los programas de salud preventiva que desarrolla esa institución benefician a estudiantes de primaria y de la Jornada Escolar Extendida.
Informó que durante el pasado mes fueron ofrecidas 245 consultas a escolares con difultades auditivas.
Destacó que para ofrecer sus servicios cuentan con equipos digitales de alta calidad. “Hacemos la detención temprana de la pérdida de la audición. Los auxiliares auditivos son aparatos bastantes costosos que muchas familias no pueden comprar”, analizó.
Operaciones gratuitas
Las limitaciones económicas también podrían impedir que muchos niños y jóvenes, de entre cinco a 16 años, puedan operarse para solucionar afecciones visuales como miopía, astigmatismo, cataratas o estrabismo.
A través del Inabie, diversos escolares han solucionado esos problemas que les afecta leer, entender y concentrarse al recibir docencia. En enero pasado el Inabie gestionó, con hospitales públicos, 23 intervenciones quirúrgicas por afecciones visuales.
También, esa institución capacita a personal de las escuelas para que, en condiciones normales (sin COVID-19) cuenten con las herramientas necesarias para detectar algún tipo de afección visual que tengan los escolares.
Aunque el Inabie tiene dos unidades móviles: una auditiva y otra odontológica, actualmente, por la incidencia del coronavirus, funcionan en la misma sede de esa institución y no en operativos en centros educativos.
Cairo, quien acompañó a reporteros de Diario Libre durante un recorrido por las instalaciones sanitarias habitadas por esa institución, informó que en enero pasado 175 niños y jóvenes recibieron lentes.
Como parte de su labor preventiva, entre noviembre-diciembre pasado, distribuyeron en distritos educativos más de 60 mil kits de higiene oral.
Desde la sede del Inabie se realiza la higiene oral, eliminación de caries, aplicaciones de flúor y extracciones de piezas.
Otro programa de prioritario es el epidemiologo. Cada año realizan dos grandes jornadas de desparasitación impactando a más de 2,300,000 estudiantes. En esa área se identifican brotes de dengue, de Enfermedades de Transmisión Alimentarias (ETA) y otros. Los operativos buscan enfrentar la parasitosis externa, producida por piojos. “Los programas de salud ayudan no solo a mantener la salud integral del niño, niña o joven, con la alimentación y nutrición; nosotros tratamos de enfrentar otros factores que permitan la salud integral de los alumnos”, dijo Cairo.
Yamalie Rosario