Cómo elegir la mejor pasta
Toma en cuenta estos consejos

Existen un sinfín de variedades de pasta, ¿verdad? Puedes encontrar pasta resca, seca, integral, blanca, rellena. Debes observar la fecha de envasado y sus ingredientes.
El primer paso es diferenciar entre la fresca o seca. Esta última dura más tiempo y no necesita refrigeración, mientras que la fresca mantiene su hidratación y requiere de frío para conservarse. El plazo para consumirla es más pequeño. Su sabor, por lo general, suele ser el preferido por los verdaderos amantes de la pasta.
Si optamos por la fresca, la mejor opción es fijarnos en la fecha de envasado o preparación para comprar aquella que haya sido fabricada en la fecha más cercana posible a la actual. En este tipo es importante valorar este dato, ya que esto influirá en la textura y sabor final del plato. Podemos cocinarla en casa tan solo usando harina, agua y sal.
La integral ayuda a prevenir el sobrepeso, es de lenta absorción y requiere de un mayor tiempo de cocción. Es más saludable, ya que reduce las posibilidades de sufrir diabetes tipo 2 o ciertas enfermedades cardiovasculares. Hablando de tiempos de cocción, lo ideal sería seguir el consejo de los italianos y cocinarla al dente. Cuando más se cueza, más rápida es la absorción de los carbohidratos, sacian menos y da menos tiempo a quemarlos.
Por último, el agua debe ser abundante y la olla debe estar destapada, permitiéndonos mover el contenido cada cierto tiempo, algo que también ayudará a que no se pegue y a que se cocine correctamente por todos lados. Como truco final, si hemos optado por un cocinado al dente, un chorro de agua fría mientras lo colamos ayudará a darle cuerpo y consistencia al pasta y a evitar que se siga cociendo por el calor.