Bulimia y anorexia: trastornos de alimentación
Adolescentes: víctimas de los desajustes por la moda
Diario Libre
Santo Domingo. Hace poco me entretuve viendo un desfile de "alta costura" y me deprimí. Las modelos en cuestión, que supongo debían lucir glamorosas, parecían en realidad sobrevivientes de un largo ayuno. Los huesos de las rodillas le sobresalían tanto que casi rompían la media panty y en una toma de "derriere", le pude contar todas las vértebras.
Y se supone que esos son parámetros de belleza. En mi caso particular, me sobran unas pocas libras que se me repartieron donde los huesos deben tener masa. Pero eso soy yo, que tengo más de 30 años, dos hijas y reclamo el derecho de sentirme bien conmigo misma en mis propios términos.
Pero ¿y nuestras adolescentes? ¿Quién les dice a estas niñas que mantener esas medidas irreales las pueden llevar a un camino de trastornos que puede matarlas? ¿Quién dice que no sean las próximas víctimas de la anorexia y la bulimia? ¿Sabría usted distinguir los síntomas?
Definiciones de anorexia y bulimia
La Organización Mundial de la Salud define la anorexia nerviosa como "una enfermedad que se caracteriza por una pérdida deliberada de peso, inducida o mantenida por el propio enfermo". En tanto que la bulimia es un síndrome que se caracteriza por "episodios repetidos de ingestión excesiva de alimentos y por una preocupación casi obsesiva por el control del peso corporal, lo que lleva al enfermo a adoptar medidas extremas para mitigar el aumento de peso producido por la ingestión de comida".
Juntas, estas dos enfermedades afectan a más del 3% de las mujeres en algún momento de su vida. En las mujeres es 10 veces más frecuente que en los varones, y afecta a jóvenes entre 13 y 23 años de edad. Ya se han documentado casos en niñas de 8 años.
Las causas de ambos trastornos son objeto de importantes estudios, aunque saben que intervienen factores socio-culturales y presiones del medio donde se desenvuelven las adolescentes. La pubertad, muertes en la familia y otras tensiones pueden ser disparadores potenciales de estos trastornos.
Ojo con los síntomas
Los síntomas no son tan evidentes; muchas veces los signos están ahí y no nos damos cuenta y a veces, es el mismo enfermo que los tapa y los niega.
En el caso de la anorexia, algunos síntomas abarcan rechazo voluntario a alimentos con muchas calorías; disminución notable de la ingestión de líquidos; conductas extrañas como cortar los alimentos en pequeños trozos, esconderlos y tirarlos; realización de ejercicios compulsivos; uso de laxantes y diuréticos, vómitos autoinducidos y uso excesivo de las balanzas.
Los síntomas físicos son más notables, como la pérdida de peso; fatiga; piel seca y pelo quebradizo; deshidratación; amenorrea, arritmias, osteoporosis, alteraciones dentales, estreñimiento, insomnio y un largo etcétera que puede culminar en casos muy graves en infartos y muerte.
La conducta bulímica puede mantenerse oculta durante largo tiempo. Los síntomas más evidentes son: atracones de comida a escondidas; comerse la comida de otros; consumo indiscriminado de chicles, café, cigarrillos, bebidas light; vómitos auto-provocados; uso de laxantes y enemas; mentiras, irritabilidad, rechazo al contacto familiar, etc.
Los síntomas físicos son parecidos a los de la anorexia, pero agravados con los producidos por los vómitos auto-inducidos como dolores crónicos de garganta, úlceras, dilatación gástrica, anemias, calambres, hipertrofia de la glándulas parótidas, infartos y muerte en sus casos más crónicos.
El proceso de recuperación es lento y doloroso. Más que físico, el trabajo es a nivel mental y emocional que involucra meses o años de terapia personal y familiar. Hablemos con nuestras hijas y enseñémoslas a amarse a sí mismas. Lo demás vendrá solo.
Brochetas de rollitos de ternera
Ingredientes para 4 personas
1 libra de carne de ternera cortada en 12 filetes pequeños
4 lonchas de queso danés o emmenthal
6 lonchas de tocineta
2 ramitas de perejil
4 cdas. de aceite de oliva
Sal y pimienta
Preparación:
Cortar cada loncha de queso en 3 trozos y la tocineta por la mitad. Extender los filetes de ternera sobre la mesa y sazonarlos con sal y pimienta.
Disponer sobre cada filete un trozo de queso y otro de tocineta. Picar las ramitas de perejil bien finas y espolvorearlas sobre la carne.
Enrollar los filetes sobre sí mismos y ensartarlos de tres en tres en brochetas de metal o madera. Freírlas en una sartén grande con el aceite caliente a fuego medio, hasta que estén doradas.
Escurrirlas sobre el papel absorbente de cocina y servirlas enseguida bien caliente.
Esta receta puede prepararla perfectamente llevando las brochetas al horno.
himilcetejada@hotmail.com
Y se supone que esos son parámetros de belleza. En mi caso particular, me sobran unas pocas libras que se me repartieron donde los huesos deben tener masa. Pero eso soy yo, que tengo más de 30 años, dos hijas y reclamo el derecho de sentirme bien conmigo misma en mis propios términos.
Pero ¿y nuestras adolescentes? ¿Quién les dice a estas niñas que mantener esas medidas irreales las pueden llevar a un camino de trastornos que puede matarlas? ¿Quién dice que no sean las próximas víctimas de la anorexia y la bulimia? ¿Sabría usted distinguir los síntomas?
Definiciones de anorexia y bulimia
La Organización Mundial de la Salud define la anorexia nerviosa como "una enfermedad que se caracteriza por una pérdida deliberada de peso, inducida o mantenida por el propio enfermo". En tanto que la bulimia es un síndrome que se caracteriza por "episodios repetidos de ingestión excesiva de alimentos y por una preocupación casi obsesiva por el control del peso corporal, lo que lleva al enfermo a adoptar medidas extremas para mitigar el aumento de peso producido por la ingestión de comida".
Juntas, estas dos enfermedades afectan a más del 3% de las mujeres en algún momento de su vida. En las mujeres es 10 veces más frecuente que en los varones, y afecta a jóvenes entre 13 y 23 años de edad. Ya se han documentado casos en niñas de 8 años.
Las causas de ambos trastornos son objeto de importantes estudios, aunque saben que intervienen factores socio-culturales y presiones del medio donde se desenvuelven las adolescentes. La pubertad, muertes en la familia y otras tensiones pueden ser disparadores potenciales de estos trastornos.
Ojo con los síntomas
Los síntomas no son tan evidentes; muchas veces los signos están ahí y no nos damos cuenta y a veces, es el mismo enfermo que los tapa y los niega.
En el caso de la anorexia, algunos síntomas abarcan rechazo voluntario a alimentos con muchas calorías; disminución notable de la ingestión de líquidos; conductas extrañas como cortar los alimentos en pequeños trozos, esconderlos y tirarlos; realización de ejercicios compulsivos; uso de laxantes y diuréticos, vómitos autoinducidos y uso excesivo de las balanzas.
Los síntomas físicos son más notables, como la pérdida de peso; fatiga; piel seca y pelo quebradizo; deshidratación; amenorrea, arritmias, osteoporosis, alteraciones dentales, estreñimiento, insomnio y un largo etcétera que puede culminar en casos muy graves en infartos y muerte.
La conducta bulímica puede mantenerse oculta durante largo tiempo. Los síntomas más evidentes son: atracones de comida a escondidas; comerse la comida de otros; consumo indiscriminado de chicles, café, cigarrillos, bebidas light; vómitos auto-provocados; uso de laxantes y enemas; mentiras, irritabilidad, rechazo al contacto familiar, etc.
Los síntomas físicos son parecidos a los de la anorexia, pero agravados con los producidos por los vómitos auto-inducidos como dolores crónicos de garganta, úlceras, dilatación gástrica, anemias, calambres, hipertrofia de la glándulas parótidas, infartos y muerte en sus casos más crónicos.
El proceso de recuperación es lento y doloroso. Más que físico, el trabajo es a nivel mental y emocional que involucra meses o años de terapia personal y familiar. Hablemos con nuestras hijas y enseñémoslas a amarse a sí mismas. Lo demás vendrá solo.
Brochetas de rollitos de ternera
Ingredientes para 4 personas
1 libra de carne de ternera cortada en 12 filetes pequeños
4 lonchas de queso danés o emmenthal
6 lonchas de tocineta
2 ramitas de perejil
4 cdas. de aceite de oliva
Sal y pimienta
Preparación:
Cortar cada loncha de queso en 3 trozos y la tocineta por la mitad. Extender los filetes de ternera sobre la mesa y sazonarlos con sal y pimienta.
Disponer sobre cada filete un trozo de queso y otro de tocineta. Picar las ramitas de perejil bien finas y espolvorearlas sobre la carne.
Enrollar los filetes sobre sí mismos y ensartarlos de tres en tres en brochetas de metal o madera. Freírlas en una sartén grande con el aceite caliente a fuego medio, hasta que estén doradas.
Escurrirlas sobre el papel absorbente de cocina y servirlas enseguida bien caliente.
Esta receta puede prepararla perfectamente llevando las brochetas al horno.
himilcetejada@hotmail.com
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