Caño Hondo se expande a los pies de Los Haitises

Paraiso Caño Hondo inició como un proyecto ecoturístico que busca acoger a los visitantes del Parque Nacional los Haitises, en el este del país. 12 habitaciones forman la oferta habitacional del único hotel, casi escondido entre las faldas del conjunto de montañas que forman el parque, en el municipio de Sabana de la Mar, en Hato Mayor. La demanda de personas que visitan y quieren pasar la noche en el hermoso y tranquilo ambiente de los Haitíses, una de las principales atracciones turísticas del país, motivó a los dueños del "Eco Lodge" a duplicar su oferta habitacional y construir en el parque otras 15 habitaciones, para una capacidad de alojamiento de 100 personas.

Las nuevas habitaciones conforman el proyecto Altos de Caño Hondo, ubicado a escasos metros de los ya existentes complejos Villa Caño Hondo y Villa Ceyba Jivales, en las colinas del parque.

El hotel cuenta de una impresionante piscina natural que forma una riada en cascada en la entrada del complejo, restaurante, habitaciones con balcón y una exclusiva vista a la Bahía de Sabana de la Mar y a los Hatises, según destaca su directora general, Rosanna Selman De León.

La ejecutiva hotelera destaca que cada año Paraiso Caño Hondo recibe entre 6,000 a 6,500 huéspedes, a los que se suman los grupos de excursionistas que hacen uso de las instalaciones del hotel en forma de "pasa día", los cuales superan los 8,000 cada año.

Sin embargo, De León se queja de que el mal estado de las vías de acceso hasta la provincia de Hato Mayor, desde Santo Domingo y desde el polo turístico de Bávaro, han frenado el potencial de desarrollo, no sólo del hotel, sino de toda la comunidad de Sabana de la Mar.

"El mal estado de las estructuras de visitación del Parque Nacional Los Haitises y del Muelle de Sabana de la Mar, desde donde se puede ir al Santuario de las Ballenas Jorobadas de Samaná, ha limitado el crecimiento de la operación ecoturística de esta comunidad, y por ende ha agravado las condiciones de pobreza extrema de sus habitantes, quienes no tienen las mínimas condiciones para desarrollar ninguna actividad productiva", sostiene.

Historia

La idea del proyecto Caño Hondo surge en 1996 como iniciativa de su propietario el arquitecto Reynaldo De León Demorizi y su socio Orlando Pimentel De León. Ese mismo año se inician los trabajos de construcción del que sería un proyecto de apoyo logístico y excursión para los visitantes del parque en esta zona. Su finalidad era la de rehabilitar el Embarcadero Paraíso Caño Hono y lograr un modelo de turismo económicamente autosostenible.

Rosanna Selman De León recuerda que antes de construirse el Eco Lodge, el acceso vehícular al embarcadero de botes de esa zona solo permitía llegar a la mitad del camino, por lo que el flujo de visitantes desde Sabana de la Mar era poco o inexistente. Como parte del proyecto Caño Hondo fueron adquirido terrenos para crear la "Marinita" de botes, un lugar desde donde poder embarcarse para visitar el Parque y a su lado se construyó también el Embarcadero de Los Haitises, a cargo de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente, según cuenta De León. En 1999 se abren al público las primeras cuatro habitaciones, a las cuales se sumaron poco después otras dos y ya en el 2003 se inauguran seis habitaciones más para un total de 12 que el hotel tiene disponible actualmente.

Pese a estar dentro de un Parque Nacional, Paraíso Caño Hondo fue reconocido en junio del año pasado por la Secretaría de Medio Ambiente, como unos de los proyectos ecológicos más sostenibles y que respetan el medio ambiente en el país.

Según De León el proyecto aporta sustento directo a unas 17 familias locales que trabajan en el lugar, además de beneficiar de forma indirecta a otras 40 familias que ven en el aprovechamiento de las excursiones al Parque Nacional Los Haitises su modo de vida y producción.