Elis Pérez pide dialogar y “de ninguna manera limitar el desarrollo del cine”

SANTO DOMINGO. Tal y como se escribió en estas mismas páginas hace varios días, la Ley de Cine parece ser el blanco del tiro a la diana de algunos tecnócratas.

El golpe parece venir a través del Presupuesto del 2018, al limitar las exenciones de las que goza la joven industria que debería ser cuidada como la niña de los ojos porque, además de dar prestigio y otros beneficios, ha sido capaz de aportar a la economía dominicana RD$1,041.3 MM, gracias a siete proyectos extranjeros a través del artículo 39 y 55 proyectos que no aplicaron al incentivo de la Ley de Cine.

Hoy por hoy, los cineastas dominicanos son insanamente envidiados por técnicos economistas, y sanamente envidiados por sus colegas de muchos países, entre ellos los cineastas cubanos, quienes a pesar de múltiples esfuerzos no han logrado que el gobierno les apruebe una Ley de Cine.

Países como Colombia, Argentina o Panamá blasonan leyes de cine que han traído múltiples beneficios y excelente prestigio a esas naciones.

Alfonso Rodríguez, destacado productor, director y actor cinematográfico, opinó que algunos de los que opinan en contra de la Ley no saben nada de cine. “No tienen la menor idea de lo que se ha convertido la industria del cine... No saben que somos la subvención menor que tiene el Estado dominicano. La única por debajo es la de energías renovables. Pero la menor cantidad de dinero que se dedica a una industria en subsidios es esa, y la del cine”, afirmó.

El prestigioso actor que protagoniza por estos días en las pantallas de los cines la película Luis, de Archie López, confirmó: “Aun así más de 12 mil personas viven de la industria del cine indirectamente. Y directamente más de 4 mil personas”, apuntó.

Y confesó: “Antes de la Ley no pagábamos impuestos. Hacíamos películas con una funda llena de dinero, ni pagábamos retención del 10%, ni pagábamos Itbis, ni absolutamente nada. Hoy somos una industria organizada, que paga el 28% de todo lo que se subsidia en impuestos. Y lo otro queda en manos de cuatro mil personas que salen a la calle a comprar gasolina, comida, ropas, carro, a pagar el 18% también en todo lo que compran. O sea que cuando vienes a ver es apenas un 35% de subsidio lo que aportan”, estimó.

Y lamentó: “Todo lo que funciona en este país, lo quieren dañar”.

Habla Adocine

Por su parte Juan Basanta, presidente de la Asociación Dominicana de Profesionales de la Industria Cinematográfica (Adocine) respondió a la pregunta ¿Está de acuerdo con que en el presupuesto se limiten las exenciones del Cine?

“No. No estoy de acuerdo. Y menos ahora que República Dominicana suena por su cine, no por cosas negativas”, dijo y puso como ejemplo de logros colaterales el hecho de que ya “hay cinco universidades que ofrecen carreras de cine”.

“Pero si van a revisar que además aprovechen mientras hacen esos ajustes que reduzcan la abultada nomina del Estado. Así como sería también oportuno rectificar la distorsión existente en el negocio de los hidrocarburos o la simple evasión fiscal”, argumentó.

“Realmente en el presupuesto nacional hay muchos gastos innecesarios que están dedicados al clientelismo político. Sin embargo esta ley de fomento a la industria cinematografica dominicana, hoy esta dando frutos más allá de lo que sus detractores quieren resaltar. Además está creando empleos en múltiples sectores de la economía nacional”, expresó el director de Biodegradable y productor de La Gunguna, entre otras.

Adujo: “Esto es una estrategia de comunicación brillante pues es importante hacer ruido con nosotros porque con ningún otro gremio como en el Cine van a poder hacer más circo al tratarse de un escenario de estrellas como Nashla, Cheddy, Raymond, Miguel o Frank Perozo o directores como Archie López o Héctor Valdez, por solo citar algunos”.

El primer director

Elis Pérez, quien fuera primer director de DGCine y actualmente es asesor de Cine del Poder Ejecutivo, opinó: “El Gobierno está tratando de optimizar los recursos que recibe por la vía fiscal, para cumplir con los compromisos que se ha propuesto llevar a cabo, de acuerdo con la formulación del Presupuesto del año próximo. En ese sentido entiendo que el Gobierno ha estado estudiando las diferentes leyes de incentivo que existen en el país, y desde hace tiempo, especialmente por recomendaciones del Fondo Monetario Internacional, que evalúe bien aquellas áreas de producción en las que se genera un beneficio real a través del incentivo, que resulte en compensación de lo que el Estado le entrega a la industria en cuestión”.

Pérez explicó que existen estudios realizados tanto por la DGCine como por otras entidades interesadas en el tema, que establecen que “el Estado si bien entrega unas cantidades por un lado, como resultado de aquellas áreas en que sí recibe contribuciones fiscales, a través del desarrollo de la industria del cine, compensa lo entregado”.

Quien es una de las personalidades más respetadas en la sociedad dominicana recomendó también lo siguiente: “Sería pertinente que tanto el área del Ministerio de Hacienda y la Dirección General de Impuestos Internos, como la Dirección General de Cine, se sentaran a procurar una fórmula que si bien establezca controles, para que no haya un dispendio innecesario de los recursos del Estado en el área del cine, tampoco se convierta en un valladar, en una limitación exagerada a una industria dominicana que sin lugar a dudas con motivos de la implementación de la Ley ha dado un salto hacia adelante y eso es visible”.

Asímismo, el ex titular de la DGCine insistió en que tienen que sentarse a dialogar y buscar por un lado cómo eficientizar los ingresos del Estado y por el otro “que de ninguna manera se vaya a limitar el desarrollo de una industria como el cine, que ha dado muestras de estar en un proceso de desarrollo bastante positivo”.

Alfonso Quiñones