¿Seguirá el poder del streaming post pandemia?

La industria del cine, tal y como la conocemos, está pasando por su peor momento. El cierre de todas las salas de a nivel mundial, como medida para combatir el contagio masivo del COVID-19, ha dejado a la industria con los brazos atados, dejándole un terreno valioso a las compañías de streaming, quienes han visto crecer sus suscriptores y el precio de sus acciones en la bolsa.

Nielsen, empresa dedicada a medir el comportamiento de los consumidores, afirma que en las últimas seis semanas solo en los Estados Unidos el incremento del tiempo de uso de streaming ha crecido en un 60%.

Aunque algunos países se preparan para abrir sus cines, España lo hará desde el 25 de mayo y China se prepara para construir 70 nuevas salas. En América todavía no se visualiza una fecha de apertura.

Pero, cuando se dé la luz verde para reiniciar las actividades regulares en las salas de cine, esta llegará de seguro con nuevas medidas de higiene y distanciamiento, lo que puede arruinar un poco la experiencia, y es allí donde el streaming sigue ganando la batalla.

Con la posibilidad de instalar modernos equipos de sonido y pantallas, los amantes del séptimo arte están logrando recrear la experiencia en sus hogares, sin el riesgo que significa compartir en lugares públicos y cerrados.

¿Quién ganará?

Es difícil hacer una afirmación. Sin embargo, en la búsqueda de sobrevivir, algunos grandes estudios están cambiando sus propias reglas y están apostando por el estreno en streaming de algunos de sus filmes. Este es el caso de Universal Pictures, que lanzó en vídeo bajo demanda la película “Trolls 2: Gira mundial”, logrando una recaudación de 100 millones de dólares en sus primeras tres semanas, demostrando que el streaming puede ser tan rentable como el cine, por lo menos durante la pandemia.

Para el crítico de cine Félix Manuel Lora, se trata de una evolución en la forma de consumo difícil de ignorar. “La guerra desde hace varios años entre el streaming y el theatrical fue una guerra sin sentido, porque el consumo de material audiovisual ha cambiado, de hecho la pandemia, y en especial la cuarentena, ha hecho que la gente consuma más películas en streaming. Creo que las reglas cambiaron por la propia demanda. El streaming no es que ganó la batalla, lo que va existir es un equilibrio entre el streaming y el theatrical. Muchas productoras y distribuidoras podrían combinar sus estrenos digitales y físicos, ya está el precedente de Universal. Creo que el mundo ha cambiado, por ejemplo cuando se cambio del 35mm al digital, provocó un cambio en la distribución. Lo que habrá es un equilibrio en materia de consumos audiovisuales”.

Pese al éxito de la propuesta, Jeff Shell, director ejecutivo de NBC Universal, indicó que esta empresa seguiría dándole relevancia a la gran pantalla. “Tan pronto como se vuelvan a abrir los cines, esperamos lanzar películas en ambos formatos”, anticipó.

La apuesta por el streaming tiene como principal detractor a la Asociación Nacional de Propietarios de Cines estadounidense, que con el cierre circunstancial de sus locales afronta una crisis inédita. “Universal no tiene motivos para utilizar circunstancias inusuales en un entorno sin precedentes como trampolín para evitar verdaderos estrenos teatrales”, argumentó su presidente, John Fithian, quien aseguró que en circunstancias normales los espectadores hubieran elegido ir a ver la cinta al cine.

Por esta decisión, AMC Theaters, la cadena más grande de Estados Unidos, anunció una guerra sin cuartel al decir que ya no exhibirá películas de Universal, en represalia a una supuesta estrategia para lanzar sus filmes en plataformas digitales.

Sin embargo, entre las propias empresas de streaming se está librando otra batalla en donde el contenido parece ser la clave. Si un usuario debe pasar más de 10 minutos buscando contenido nuevo, sencillamente no verá nada, razón por la cual las empresas están sumergidas en producir contenido original. Sin embargo, la mayoría de los rodajes están detenido, por lo que muchos estrenos de series y filmes también se han atrasados para empresas como Netflix y HBO.

La casería por nuevo contenido definiría la permanencia del poder del streaming frente a los cines.

Rocío Figueroa