Dr. Víctor Atallah: “El 31 % de dominicanos mayores de 18 años sufre hipertensión arterial”

¿Qué se entiende por hipertensión arterial? 

Para entenderla mejor debemos explicar qué es la presión arterial, que no es más que la fuerza que garantiza que la sangre y todos sus componentes llegue a todos los órganos de manera adecuada y continua. Esta resulta de dos factores esenciales, de la fuerza que ejerce el corazón con su bombeo para impulsar la sangre por todos los vasos sanguíneos, y de la resistencia que ofrezcan estos vasos para la conducción de la sangre. Teniendo dos valores importantes, el primer número o de arriba (sistólico) es cuánta presión ejerce la sangre contra las paredes de la arteria cuando el corazón late y se contrae; y el segundo número o de abajo (diastólico) ocurre con cada relajación, es cuanta presión ejerce la sangre contra las paredes de la arteria mientras el corazón se encuentra en reposo entre latidos. Al tomar la presión arterial medimos estos números, que idealmente deberían ser menores a 120 el número de arriba y 80 el número de abajo. 

¿Como se diagnostica?

Mediante la toma de la presión arterial con su médico, usando el esfigmomanómetro, que debe seguir un protocolo adecuado en la consulta, toma de ambos brazos, sentado y relajado. Si se la toma en su casa con un aparato casero y tiene dudas, siempre confirme con su médico. Es recomendable medirse la presión arterial periódicamente, cada 6 meses o anual dependiendo de la edad y niveles. 

En algunos casos el médico puede ordenar una prueba en la cual se le coloca un aparato, llamado MAPA (Monitoreo Ambulatorio de Presión Arterial) en el brazo, que le medirá la presión arterial durante todo el día en intervalos, para tener más precisión en el diagnóstico, descartar hipertensión, saber el comportamiento durante todo el día de la presión, y tener el control adecuado de la presión arterial si estamos tomando tratamiento. Se lo indico a todos mis pacientes con sospecha, o si están en tratamiento para saber qué tan bien controlados están. 

¿Qué síntomas la identifican?

La hipertensión arterial suele no presentar síntomas por muchos años, y por eso la llaman “la asesina silente”, por lo que es esencial tomarse la presión periódicamente. Hay síntomas usuales, como dolor de cabeza, pesadez, dificultad para respirar, mareos, sangrado nasal, pero varían mucho y dependen de cada paciente, severidad y tiempo de la hipertensión. 

¿Cuáles son las causas?

En la mayoría de los casos (90-95%) no sabemos por qué se produce la presión arterial, a esta se le llama hipertensión esencial o primaria; en el resto hay una causa, entonces se le llama hipertensión secundaria. 

¿Cuáles son los factores de riesgo?

Hay predisposición a desarrollar hipertensión arterial si un familiar de primer grado la sufre, si un progenitor (o ambos) son hipertensos. Los hombres tienen más predisposición a desarrollar hipertensión arterial que las mujeres hasta la edad de la menopausia, entonces se iguala. Esto se debe a las hormonas femeninas que protegen a la mujer durante la edad fértil, reduciendo el riesgo. La edad es otro factor. Tanto la presión arterial sistólica o máxima, como la diastólica o mínima, aumentan con los años, usualmente a partir de los 40 años. La diabetes también aumenta el riego de hipertensión. Las personas de raza negra tienen el doble de posibilidades de desarrollar hipertensión que las de raza blanca, además de un peor pronóstico. Los fumadores por igual tienden a desarrollar más hipertensión. 

El sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de tener más alta la presión, dos y tres veces superior a los individuos con peso normal, aún más evidente en los menores de 40 años y en mujeres. 

En los casos en que haya una causa específica de hipertensión, hipertensión secundaria, el médico debe buscar la causa pues en estos casos es posible curarla totalmente.

¿Qué se recomienda?

El control de los factores de riesgo, dieta saludable, control de sobrepeso, no fumar, control de alcohol, práctica regular de ejercicio físico, seguimiento cercano y de las enfermedades adyuvantes, disminuye el riesgo de hipertensión y sus complicaciones. 

¿Qué consecuencias acarrea no tratarla?

La hipertensión arterial no tratada tiene consecuencias serias que dependen de la severidad y duración. Puede causar daños en el cerebro, corazón, riñones (fallo renal, insuficiencia renal), ojos (retinopatía hipertensiva, hemorragia, ceguera), pero afecta a todos los órganos por recibir una presión alta. La hipertensión arterial aumenta la carga de trabajo del corazón y puede causar dolor torácico y/o ahogo, angina, infarto, falla cardiaca congestiva, puede llevar a la ruptura de arterias cerebrales (derrame cerebral hemorrágico), o a la formación de aneurismas (dilatación de las arterias) y posible ruptura de estos aneurismas o disección; todas estas consecuencias de mucha gravedad. 

¿Qué se conoce por crisis hipertensiva?

Una crisis hipertensiva es un aumento grave de la presión arterial que puede provocar daños severos, y debe ser atendida de urgencia. Usualmente se define como una presión máxima (presión sistólica) de 180 milímetros de mercurio (mm Hg) o más o una presión mínima (presión diastólica) de 120 mm Hg o más, pero podría ser menos si hay síntomas importantes asociados. Los vasos sanguíneos se inflaman y podrían generar pérdidas de líquido o sangre. Como resultado, el corazón no podría bombear la sangre de forma eficaz. La crisis hipertensiva se divide en dos categorías: urgencia y emergencia. 

Durante una crisis hipertensiva de urgencia, la presión arterial está extremadamente elevada, pero no hay evidencia o síntomas de daño en otros órganos. En una emergencia hipertensiva hay evidencias o síntomas de daño en órganos: dolor de pecho intenso, dolor de cabeza intenso, confusión y visión borrosa, náuseas y vómitos, ansiedad grave, dificultad para respirar, convulsiones, pérdida de conocimiento, entre otros.

Ambas deben ser atendidas rápidamente y muchas veces ameritan internamiento y otras medidas dependiendo de la severidad. 

¿Cuáles son los diferentes tipos de hipertensión arterial?

La hipertensión tiene varios tipos, ya explicados (primaria y secundaria) y varios niveles y estadios definidos por niveles como el cuadro previo. Los diferentes niveles ameritan tratamiento acorde al nivel y severidad. 

¿Qué pronóstico tiene? 

Depende de la intensidad, tiempo de evolución y efecto en órganos, enfermedades agregadas, por lo que, si se detecta a tiempo, se estudia y se sigue adecuadamente, sumado a un control de estilo de vida pudiera tener un excelente pronóstico ya que hay muchísimas opciones de tratamiento y avances. 

¿La alimentación cuenta?

Una alimentación adecuada es esencial, así como el control del peso, no excederse en la sal, limitar el alcohol, los azúcares, los alimentos procesados y grasas malas.

¿Qué porcentaje de la población la padece y a qué edad suele darse?

Un alto porcentaje y aumenta con la edad, sobre todo a partir de los 40 años. La hipertensión arterial es la enfermedad crónica más importante para el desarrollo de enfermedades vasculares a nivel de los riñones, cerebro y corazón. Estudios recientes han arrojado que un 31% de dominicanos mayores de 18 años sufren HTA; la prevalencia mayor en mujeres (32 %) y en hombres (29.7%).

Norys Sánchez

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Norys Sánchez es periodista. Formó parte del equipo fundador de Revista Rumbo y Diario Libre. Fue editora de la revista Madre Única. Autora del libro La palabra de los sueños, una selección de entrevistas a personalidades del mundo político, económico, diplomático y social del país.