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Cuando se da un mal uso a la voz

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Cuando se da un mal uso a la voz
La disfonía es un término que engloba cualquier tipo de alteración de la voz. En los últimos años se diagnostican numerosos trastornos, ocasionados por un mal uso vocal, el elevado ruido medioambiental, la inadecuada climatización de los lugares de trabajo y, sobre todo, el empleo de una excesiva tensión muscular para emitir la voz.

Según explica el doctor Fernández, "la voz es la herramienta de comunicación más importante y más utilizada, y sus lesiones interesan cada vez más. La población se ha vuelto más exigente y lo que hasta ahora no era un motivo de consulta habitual en la actualidad es demandado con mayor frecuencia, desde niños hasta ancianos. Uno de los grupos más sensibilizados con este tema son las personas que utilizan la voz como instrumento de trabajo: profesores, locutores, sacerdotes, cantantes, alumnos y profesores de canto.

Patologías más frecuentes.

La laringitis es el trastorno de la voz más frecuente. Se trata de la inflamación de las cuerdas vocales, en la mayoría de los casos por una infección viral. Habitualmente no exige un tratamiento específico y se resuelve de forma espontánea.

Un trastorno muy común es el relacionado con el abuso vocal o con el mal uso de la voz, a causa de una mala técnica fonatoria. La unión de ambos factores puede ocasionar la aparición de edema y otras lesiones orgánicas, como nódulos vocales, pólipos, hemorragias. "Además es habitual diagnosticar disfonías asociadas al reflujo gastroesofágico. En estos casos el ácido que procede del estómago y que asciende de la cavidad gástrica afecta a la laringe y las cuerdas vocales", explica Maite Molina, logopeda de la Clínica Universitaria de Navarra, España.

Otras lesiones menos frecuentes que producen disfonías son las patologías de tipo neurológico, como las parálisis laríngeas; las lesiones premalignas y malignas relacionadas con el tabaco; así como los granulomas, trastornos endocrinológicos

Cerca de un 5% de la población sufre algún trastorno de voz que requiere la atención de profesionales especializados, si bien las personas que utilizan la voz como herramienta de trabajo tiene más riesgo de desarrollar esta afección. "En concreto, más del 50% de los docentes sufre algún trastorno de la voz. Son los profesionales más sensibilizados ante estas lesiones; de hecho, es la segunda causa de baja laboral. En la mayoría de los casos la causa de la disfonía es un mal uso o abuso vocal".

En términos generales, las mujeres son más susceptibles de sufrir lesiones laríngeas. Además entre un 30 y un 40% de la población infantil en edad escolar padece disfonía.

Abordaje multidisciplinar.

Los profesionales de la Clínica Universitaria de Navarra, España insisten en la necesidad de establecer un abordaje multidisciplinar de los trastornos de la voz. Con una experiencia de más de quince años, la Clínica Universitaria y su laboratorio de Voz es un centro pionero en la detección y tratamiento de las disfonías.

"El diagnóstico de lesiones vocales se realiza a través de distintos procedimientos de exploración de la cavidad oral, las fosas nasales y la faringolaringe, mediante ópticas flexibles o rígidas. Una de las técnicas más importantes es la estroboscopia, que proporciona una información visual de la laringe, y el movimiento ambulatorio de la mucosa de las cuerdas vocales lo que resulta especialmente útil para evaluar trastornos de la voz".

El tratamiento de estas lesiones requiere la colaboración del logopeda o foniatra, que se encarga de rehabilitar o corregir los trastornos funcionales de la voz. "Es muy importante establecer una técnica vocal correcta y pautas preventivas de higiene vocal para conseguir una mejor calidad de voz, con lo que se evitan futuros trastornos vocales", explica Maite Molina. El abordaje terapéutico se completa con un tratamiento farmacológico y quirúrgico, en función de cada caso.