“Bidó: siempre presente”, la exposición que honra la obra de Cándido Bidó
Recorre la trayectoria del fenecido artista criollo en la Galería Nacional de Bellas Artes

Cándido Bidó es marca país. Su nombre está en la historia del arte dominicano. Nacido en Bonao en el año 1936 y fallecido en 2011 a causa de un infarto, plasmó en sus obras las costumbres criollas y elevó el amor por la naturaleza y los paisajes del campo.
El intenso color azul y ese retrato a la mujer dominicana pueden apreciarse más de cerca en la inaugurada exposición “Bidó: Presente siempre”, una retrospectiva de toda su trayectoria que recoge pintura, dibujos, escultura y documentos personales.
La cultura dominicana
En un recorrido realizado, la exposición “Bidó: siempre presente” es cautivadora de principio a fin.
A la entrada, detente a observar un mural de 126 x 140 pulgadas. La historia de este trabajo visual de gran tamaño destacando el azul de fondo (el color que más abunda en la pintura de Bidó) fue una pintura realizada especialmente para otro destacado pintor, Silvano Lora, (1931-2003) a propósito de la Bienal Marginal en los años 80, según cuenta su hijo José Luis Bidó a Diario Libre.
Otras pinturas resaltan a las personas en su cotidianidad, como el padre, la madre y el niño mirando desde la ventana y las jovencitas montando bicicleta.
Llama la atención la de “Los amantes”, una pintura de óleo sobre acrílico de 40 x 40 pulgadas que data del año 1977.
Al subir al segundo piso espera la colección de obras más personal: la sala de Maternidad. Este espacio recoge las pinturas sublimes sobre la mujer en la etapa de gestación y cuando están cuidando a sus retoños.
La mujer de trabajo es retratada de múltiples maneras. Puede verse la que sostiene un ‘bidón’ en su cabeza. Se trata de una larga lata de aceite hecha de metal que es reutilizada para cargar agua y alimentos.
Además, en otros espacios, incluyendo el piso, puede verse uno que otro lienzo de gran tamaño.
Las esculturas en madera y hasta muñecos hechos de trapo forman parte de la colección personal.
No pueden faltar las fotografías, siempre risueño, donde se muestra a Bidó en plena faena. Una de esas imágenes acompañado del artista Leopoldo Pérez.
Detalles
Marianne de Tolentino, directora de la Galería Nacional de Bellas Artes, ubicada en el Palacio de Bellas Artes, en el acto de apertura definió a Bidó como “un amigo entrañable, un ser humano y artista maravilloso, el pintor emblemático de la cultura”.
Las obras salieron del patrimonio familiar y de coleccionistas, cuyos dueños las han cuidado con recelo.
“Aspiramos a la síntesis de una creación que jamás detuvo la búsqueda de nuevas expresiones ni rompió con los periodos anteriores, fiel a su identidad”, consideró De Tolentino sobre el trabajo el pintor de Bonao.
Destacó que en la muestra no solo están las pinturas, el collage y el dibujo, sino también el volumen y la tercera dimensión.
“La madurez siempre mantuvo en Cándido Bidó el espíritu de la juventud. Alcanzó sus metas personales y colectivas. Logró el éxito internacional”, concluyó la curadora.
Mario Lebrón, director general de Bellas Artes valoró que es una gran exposición compuesta por más de 70 obras que incluyen pinturas, esculturas y documentos personales del maestro Bidó.
“El maestro manejó tanto el tema criollo en los espacios del campo, la ciudad, la persona dominicana, sobre todo la mujer, la madre, con mucha destreza manejó el color intenso del trópico”.
Para Lebrón, el fenecido artista representa lo mejor de la cultura netamente dominicana.
“Agradecemos a todos los que han facilitado las obras”, dijo.
Esta exposición retrospectiva es imperdible. ¡Date la vuelta!

Galería Nacional de Bellas Artes. Abierta hasta diciembre. De lunes a viernes de 9:00 de la mañana a 5:00 p.m. y los sábados de 10:00 a.m. a 1:00 de la tarde.

Daniela Pujols