VIDEO | Historiador mexicano cree preocupante la transición de los archivos hacia la conservación digital
El tema fue debatido por expertos nacionales y extranjeros en el VI Encuentro Nacional de Archivos
SANTO DOMINGO. Ramón Aguilera, historiador y director general de la Escuela Mexicana de Archivos, expresó que los archivos de América Latina viven una etapa de transición de lo analógico hacia lo digital, que considera preocupante.
El profesional, quien participó como expositor en el recién pasado VI Encuentro Nacional de Archivos, dedicado a la gestión documental y a la administración electrónica, organizado por el Archivo General de la Nación (AGN) y la Oficina Presidencial de Tecnologías de la Información y Comunicación (OPTIC), se refirió a la importancia que tiene para el historiador la conservación de documentos.
Expresó que se piensa a veces que los archivos históricos, con los que se hacen investigaciones, nacen de manera espontánea, pero que en realidad son fruto de todo un proceso de años y años de acumulación de informaciones que se producen en las organizaciones, sobre todo en las públicas.
Explicó que, por ejemplo, los antiguos archivos novohispanos de América Latina, sobre todo del siglo XVI al XVIII, fueron originalmente documentos administrativos.
“(Los archivos) fueron parte de la vida cotidiana de la administración en todas sus fases y con el correr del tiempo fueron tomando un nuevo valor. De tener un valor administrativo pasaron a tener un valor cultural. A eso le llamamos patrimonio documental. Es el sustento de la identidad cultural de un pueblo, en donde está la explicación de su ser. Y es donde trabaja el historiador, en este tipo de archivo”, puntualizó.
Dijo que en la actualidad se producen documentos administrativos día a día. “Claro, no todos son importantes, pero hay algunos que van a tener un valor cultural importante que tendrán que ser guardados y conservados para el futuro, para los historiadores”, añadió.
Aseguró que el historiador va trabajando de acuerdo a sus intereses personales, pero también para responder a las necesidades de la sociedad y a las tendencias de estudios y enfoques, a fin de poder explicar realidades.
Acotó que el historiador tiene que hacer una interpretación del pasado, acercándose lo más posible a lo que sucedió, para lo cual el archivo es muy útil.
Las nuevas tecnologías y la archivísta

Aguilera expresó que en relación a la archivística está ocurriendo una transición del manejo analógico al digital en América Latina, y que se ha producido una problemática muy seria y preocupante.
“Es una transición silenciosa, una transición en la que no se dan cuenta realmente de lo que sucede en las oficinas públicas”, porque no hay una línea de trabajo en la que converjan las tecnologías de la información (TICS) y el trabajo de los archivos. “Los temas no están armonizados y estamos desfasados en ese sentido”, agregó.
Dijo que en muchas oficinas públicas la creación de los documentos electrónicos está en manos de la secretaria, que no tiene idea de lo que tiene que hacer. “Ahí tenemos un peligro, porque esos documentos no están garantizados en cuanto a su conservación, porque quedan al resguardo de la secretaria, que, si se equivoca y aprieta mal, pues se pierde la información”, agregó.
Afirmó que el otro elemento importante es que el archivo todavía no se concibe dentro del ámbito electrónico y no se piensa en lo que significa un repositorio digital.
“Lo confundimos con un data center. Lo confundimos con un servidor. Lo confundimos con una computadora, con una PC. Pensamos que ese es el lugar del archivo, y no pensamos que así como tenemos el Archivo General de la Nación, un lugar específico donde guardamos la documentación, con ciertas características de seguridad, de conservación, de cuidado, lo mismo tendría que ocurrir en el ámbito digital”, puntualizó.
Sostuvo que debe existir un archivo con ciertas características específicas en el ambiente digital, que “garantice que el documento que se guarde se va a poder consultar dentro de 30 años, dentro de 20 años”.
No obstante, señaló que se trata de una tarea pendiente y de alto riesgo, pues no se están clarificando las normas para la conservación de documentos.
“No nos sirve de nada que tengamos portales bonitos para darles servicios al ciudadano si al final del camino la información que se da en esos portales no se va a encontrar. Si usted quiere darle seguimiento a un trámite y el documento por dentro se perdió porque no hay seguimiento, pues de nada sirven los portales, pues al final del camino vamos a perder la información. Esos son problemas sobre los que hay que reflexionar para ir resolviéndolos de manera integral”, enfatizó.
Dijo que el VI Encuentro Nacional de Archivos hizo énfasis en el manejo de la información en todos sus aspectos, pero relacionado con el mundo de los archivos.
“Los archivos no pueden estar ajenos a los cambios tecnológicos, obviamente, pero estos cambios tecnológicos no pueden desconocer la metodología que los archivos proponen para que la información pueda generarse desde el principio de manera correcta”, indicó.
Agregó que otra situación que afecta la conservación de documentos es la obsolescencia tecnológica.
Emilia Pereyra
Emilia Pereyra