Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Historia dominicana
Historia dominicana

Manuel Brugal Kundhart resalta heroísmo de Spignolio Mena, líder del frente interno contra tiranía trujillista

La Academia Dominicana de la Historia hizo un conversatorio sobre la “Expedición de Luperón 1949: el exilio y el frente interno”

Expandir imagen
Manuel Brugal Kundhart resalta heroísmo de  Spignolio Mena, líder del frente interno contra tiranía trujillista
Fernando Spignolio Mena, fundador del Frente Interno de Liberación, creado en Puerto Plata para combatir a la tiranía de Trujillo. Fuente externa.

SANTO DOMINGO. El escritor Manuel Andrés Brugal Kundhart reveló detalles inéditos de la forma en que fue creado el Frente Interno de Liberación, surgido en Puerto Plata para combatir la dictadura de Trujillo, y la manera en que fueron asesinados el líder del movimiento, Fernando Spignolio Mena, y su estrecho colaborador y amigo, Fernando Suárez.

Durante un conversatorio realizado por la Academia Dominicana de la Historia sobre la “Expedición de Luperón 1949: el exilio y el frente interno”, en el que participaron igualmente el historiador José del Castillo y Luisa de Peña Díaz, directora del Museo Memorial de la Resistencia Dominicana, Brugal Kundhart manifestó que la historia del Frente Interno de Liberación provoca en todos los que la conocen por primera vez una gran admiración, no solo por la valentía de los que formaron parte del mismo, sino, también, y principalmente, por todo lo que se logró, pese a su trágico final.

“Contar ahora que en plena dictadura de Trujillo un grupo de jóvenes puertoplateños creó una organización que se puso en contacto con el exilio dominicano en Puerto Rico y trajo armamentos desde allá para constituirse en contraparte armada interna de expediciones militares provenientes del exterior, y que también proveyó de armas a otro grupo que se proponía atentar contra la vida del tirano en la capital, es algo que parece increíble”, dijo.

Eso amerita, agregó, que la historia coloque en un lugar alto a quien ideó la creación de ese grupo, visualizó su acción futura y dirigió su ejecución: Fernando Spignolio Mena. Dijo que los errores que cometió el dominicano no empequeñecen su figura histórica, sino que la hacen más humana.

Al inicio, Brugal Kundhart, ingeniero civil y narrador, explicó que su disertación se basaría en un manuscrito del doctor José Augusto Puig Ortiz sobre el Frente Interno de Liberación, aun inédito. También utilizó, dijo, las entrevistas que Mirna Santos hizo a antiguos miembros del frente y relacionados, publicadas en 1998 por el periódico Hoy, y las informaciones derivadas de conversaciones que sostuvo con personas muy mayores de Puerto Plata que participaron directamente en la organización y conocían muy bien su historia.

Creación del Frente Interno de Liberación

El expositor relató que según afirma en su manuscrito el doctor Puig, el Frente Interno de Liberación se fundó en febrero de 1945 y fue Spignolio Mena quien lo ideó e invitó a tres pares de amigos, que llegaron por distintas vías y medios, a juntarse con él en la playa del Viejo Mejía, cerca de la ciudad de Puerto Plata, sin saber ninguno el propósito de la reunión.

Aseguró que los seis invitados fueron César Dottin, Pablito Ricardo, Luis Ortiz Arzeno, César Bordas, José Rafael Bordas Castellanos y el mismo doctor Puig.

“Esos siete jóvenes de clase media y media alta fueron los fundadores de lo que posteriormente, a finales de ese mismo año o principios de 1946, se llamaría Frente Interno de Liberación”, indicó.

A continuación, explicó que la reunión la inició Fernando Spignolio diciendo que había que terminar con la tiranía, pero que para lograrlo se necesitaba pasar a la acción y que para derrocar a la dictadura se requerían armas y para conseguirlas él pensaba hacer un viaje a Puerto Rico, para lo cual pidió contribuciones a todos y se reunieron doscientos pesos.

Aclaró que en ese encuentro no “hubo juramento, ni redacción de un manifiesto o programa, pero sí un compromiso orientado a la acción, la que en esta primera fase se limitaba al viaje que haría Fernando a Puerto Rico.

Narró que tras vencer algunos obstáculos, Spignolio Mena viajó a Puerto Rico y logró el compromiso de los dirigentes del exilio para el envío de las armas solicitadas.

“También acordó con ellos cómo se enviarían a Puerto Plata y coordinó los medios para comunicarse. Ambas cosas se harían por vía marítima, sirviéndose de embarcaciones que se dedicaban a transportar mercancías entre ambas islas y a cuyos capitanes él conocía por su trabajo en la Aduana”, enfatizó.

Afirmó que el ingreso del primer cargamento de armas se hizo en agosto de 1946, un año y un mes antes de la expedición de Cayo Confites y que el primer traslado fue hecho en la goleta capitaneada por Félix Lahoz, conocido marino puertoplateño, miembro del frente, quien se destacó por su entrega a la resistencia antitrujillista y por su valentía.

Manifestó que pese a todos esos filtros y exigencias ideados para captar a los miembros del frente, este creció notablemente e incorporó a obreros y campesinos y representó a casi todos los grupos sociales de Puerto Plata.

Explicó que no obstante sus fortalezas, el frente tenía dos debilidades y que una de ellas era la falta de entrenamiento de muchos de sus dirigentes y miembros en el manejo de armas, algo que era difícil de superar, pues era casi imposible encontrar lugares para entrenar sin que los servicios de espionaje del régimen no se enteraran, además del riesgo de ser descubiertos trasladando el armamento de un lugar a otro.

“La segunda (debilidad) era el tipo de liderazgo de Fernando Spignolio. Él fue quien ideó y creó el Frente, visualizó lo que había que hacer y lo hizo. En poco tiempo realizó y dirigió muchas acciones solo y había sido exitoso. Pero se acostumbró a actuar así y su liderazgo se hizo centralizador. Esto facilitó el trabajo de infiltración del movimiento, pues si se llegaba a Spignolio se llegaba a todo”, subrayó.

Expandir imagen
Infografía
Manuel Andrés Brugal Kundhart durante su exposición en la Academia Dominicana de la Historia. Karina Valentín Sánchez/ADH.

El delator del frente, Antonio Jorge Estévez

Brugal Kundhart aseguró que Antonio Jorge Estévez fue la persona que se infiltró en la organización y luego la traicionó. “(Era) Hijo del general Antonio Jorge, quien después de servir a Horacio Vásquez se pasó al bando de Trujillo, a quien le sirvió como secretario de las Fuerzas Armadas y luego senador, llegó a Puerto Plata como militar retirado a hacerse cargo de la Hermandad de Veteranos”, añadió.

Dijo que el Frente Interno de Liberación esperaba la expedición de Cayo Confites un domingo de septiembre de 1947 y que el aborto de la expedición, conocido en Puerto Plata a través de la emisora de radio cubana 1010, fue muy frustrante para sus miembros, ilusionados con la posibilidad de derrocar a Trujillo.

Rememoró que las labores delatoras de Jorge Estévez fueron muy eficaces, y que mientras esperaban la llegada de los expedicionarios en la madrugada del día 20 de junio de 1949, pasada la una, un gran número de soldados rodeó la casa de Fernando Suárez y lo llamaron.

“Al asomarse Suárez a la puerta, los soldados le dispararon y él disparó. Herido y con sus fuerzas disminuidas, su esposa lo tomó y lo llevó a un sillón, donde los guardias lo remataron casi en sus brazos. Fernando Spignolio no estaba armado y se había escondido en otra parte de la casa. Los soldados, ya en la sala, preguntaron por él. Salió poco después y dijo: ‘Soy Fernando Spignolio’. Acto seguido, fue acribillado a balazos. El teniente Vizcaíno, al frente de las tropas, hizo presa a Consuelo y tuvo la intención de asesinarla. Los cadáveres fueron sacados de la casa y tirados en sus alrededores”.

Dijo que al entierro asistieron muy pocos hombres y no estuvo “ninguno de los miembros de la organización acudieron, por razones de seguridad evidentes”.

Con detenciones y asesinatos, afirmó, el terror impuso el silencio en una ciudad consternada. “Cuando el féretro de Spignolio salía de la iglesia San Felipe, el de Suárez llegaba. Desde la Fe, el club que cobijó la clandestinidad de Spignolio, muchos ojos vieron el triste encuentro de ambos”, subrayó.

“Antonio Jorge Estévez había cumplido con su trabajo. El Frente Interno de Liberación perdió a doce de sus miembros, entre ellos su cabeza. Casi todos los que él identificó en la gallera como amigos de Fernando Spignolio fueron fusilados, incluyendo a tres hermanos. Chita, su viuda, perdió, además, a un hermano y un tío”, señaló.

Expandir imagen
Infografía
Vista del público, en la Academia Dominicana de la Historia. Karina Valentín Sánchez/ADH.

Cualidades de Spignolio Mena

Fernando Spignolio Mena era hijo de don Pedro Spignolio Garrido, intelectual puertoplateño, quien llegó a trabajar varios años como secretario del arzobispo Fernando Arturo de Meriño, con amplias relaciones políticas y sociales en Santo Domingo, y de doña Albertina Mena Steinkoph.

Brugal Kundhart, además, de aportar esos datos biográficos, contó que pese a haber sido hijo de un intelectual, Spignolio Mena no hizo los estudios secundarios, pero estudió música en la academia de don Luis Lora y formó parte de la banda municipal de música.

“Sus amigos se sorprendieron al verlo entrar a trabajar como celador de segunda o tercera categoría en la Aduana. Ya en 1945, con 27 años, era oficial de Aduana. En el plano social era reservado, no andaba en grupos, no hablaba de política, se caracterizaba por su hermetismo”, señaló.

Apuntó que don José Augusto Puig le atribuyó a Spignolio Mena cualidades personales de valor, discreción, carácter y atrevimiento. “Por esas características y por la confianza que despertaba, se mantuvo como líder del Frente desde el principio hasta el final”, dijo.

TEMAS -