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Veinte voces rescatan las palabras de Carmen Natalia

Recitan el poema “Llanto sin término por el hijo nunca llegado” por centenario de su nacimiento

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Veinte voces rescatan las palabras de Carmen Natalia
Isabel Martínez Bonilla, hermana y albacea de Carmen Natalia. (FUENTE EXTERNA/MAYA OVIEDO DUCOUDRAY)

SANTO DOMINGO. Cada palabra fue cayendo como martillo en un silencio atravesado por la emoción de un reducido público, que atento escuchó en toda su extensión uno de los poemas fundamentales de la escritora dominicana Carmen Natalia Martínez Bonilla, cuyo centenario de nacimiento es conmemorado en la Feria Internacional del Libro 2017.

“Llanto sin término por el hijo nunca llegado” fue recitado por 20 voces femeninas, entre las que se encontraba Isabel Martínez Bonilla, hermana de la poeta, en un acto realizado ayer en la Biblioteca Nacional y coordinado por la escritora Ylonka Nacidit Perdomo.

El poema, que obtuvo el premio del Ateneo Puertorriqueño en 1959, fue leído en su versión original, mecanografiada por la escritora, feminista y luchadora antitrujillista, en cuyo honor fue bautizada la sala donde se hizo el recital.

El llanto por el hijo no llegado

Carmen Natalia, sin los apellidos como prefería firmar sus textos, escribió este largo poema, compuesto en forma de oración en salmos, en 1959 durante su exilio en Puerto Rico, país en el que se radicó al huir de la persecución de la tiranía trujillista contra ella y su familia.

El texto poético inicia con una “Invocación”, que tal como lo dice la palabra llama la presencia del hijo que no tiene, y “diez llantos”, cada uno como un canto en que se evoca la ternura, la desolación y el reclamo ante la opresión de la dictadura.

“Se trata de una poesía intuitiva; poesía arrancada en la entraña misma de la existencia; poesía también de proyecciones metafísicas. La respiración natural del testimonio de sinceridad creadora. El verso libre, ancho, ajeno a la presión de los metros, pero a la vez contenido, produce al lector la sensación de “llanto” justo. Del surtidor de “mis insondables ríos desbordados” brota esta poesía hecha no a cincel sino desesperado golpe de sangre”, consideraron los miembros del jurado del Ateneo Puertorriqueño cuando premió este poema en 1959.

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Infografía
Participantes del recital, junto al director de la Biblioteca Nacional Diómedes Núñez Polanco. (FUENTE EXTERNA/MAYA OVIEDO DUCOUDRAY)

Veinte voces

“Te invoqué desde el fondo del abismo./Te llamé, desesperadamente,/gritando el dulce nombre a tus oídos.../pero tú estabas lejos”. Estos versos iniciaron el recital en voz de María Teresa Ruiz de Catrain, quien vestida de blanco igual que las demás y junto Lucía Amelia Cabral, era escuchada por un reducido pero atento público.

En sus manos estaba una hoja amarillenta, parte del original mecanografiado del poema que minutos antes sacó de una pequeña caja de madera tallada la escritora Ylonka Nacidit Perdomo y que perteneció a Carmen Natalia. El cofre junto con la foto de la poeta, una de los años 1950 que muestra a una mujer joven y sonriente que mira al infinito, era una especie de pequeño altar en memoria de la escritora nacida en San Pedro de Macorís en 1917, la misma ciudad en que nació también el escritor René del Risco Bermúdez, a quien está dedicada esta vigésima versión de la Feria del Libro.

A continuación, y en parejas, tomaron asiento para las lecturas de “los llantos” de Carmen Natalia, María Amalia León de Jorge, Clidia Diaz de Ortega, Rosario Bordas de Shad, Martha Rosalia Roques De Guerra, Ada Hernández, Emelda Ramos, Yanela Hernández, Ynoemia Villar y Altagracia Pou Suazo.

En una segunda ronda recitaron nuevamente el poema Isabel (Isabelita) Martínez Bonilla Vda. Roques, Ofelia Berrido, Sabrina Román, Elvira Lora, Eleanor Grimaldi, Verónica Sención, Carmen Rosa Estrada, Raquel Rosario Sánchez, Ylonka Nacidit Perdomo y Yadira Henríquez de Sánchez Baret.

Su obra ausente en la FIL

A pesar de que el centenario de su nacimiento es recordado en el marco de la Feria Internacional del Libro 2017, en algunos stand recorridos ayer, inclusive el del Ministerio de Cultura, no se pudo encontrar un libro o texto de Carmen Natalia, quien dejó publicados, antes de su muerte en 1976, los poemarios “Alma adentro” (1939), “Llanto sin Término por el Hijo Nunca Llegado” (1959), y “El Hombre Tras las Rejas” (1962). Las novelas “La Victoria” (1942) y “Cristóbal”, así como su libro de ensayos “Veinte actitudes y una epístola”.

Entre sus obras de teatro se encuentran “Adaptaciones de la Cenicienta y la Bella Durmiente” (1950); El milagro de la Epifanía” (para ser representada por niños ciegos, 1953),y “Estampas de la vida de María” (para ser representada por niños sordomudos, 1954).

Llanto quinto leído por Martha Rosalia Roques De Guerra

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