INTEGRAR CUERPO, MENTE Y ESPIRITU
No es religiónTalvez por proceder de Oriente la gente suele asociarla al hinduismo o al budismo pero no hay ninguna asociación con creencia religiosa alguna.
El yoga es una ciencia humana que trata de mejorar al hombre en su parte física, con sus técnicas de ejercicios, respiración, relajación, dieta y terapia", en opinión de Cecilia Camino, bailarina profesional y maestra de Hatha-yoga, quien realizó sus estudios en la Escuela Nacional de Danza perteneciente al Instituto Nacional para la Cultura y las Artes de la ciudad de México.
La palabra Yoga proviene de la raíz sanscrita yup, cuyo significado es unión, integración (de cuerpo-mente-espíritu). Unificación de sí mismo.
¿Y qué somos? "Somos mente, cuerpo y espíritu, lo que quiere decir que yoga es la unión, integración y comunicación del cuerpo, la mente y el espíritu, y cuando logramos esa unión, ese equilibrio, experimentamos un estado de paz y tranquilidad con nosotros mismos y con todo lo que nos rodea", dice Cecilia.
La ciencia del yoga se divide en varias ramas, el Hatha Yoga es aquella que parte de la filosofía yoguística que trata del cuidado, bienestar, salud y vigor del cuerpo físico. Es un sistema práctico y perfecto de auto-cultura.
El yoga implica retraer la mente del mundo objetivo para concentrarla en el mundo interior.
El yogui (quien practica yoga) sabe que el cuerpo es el templo del espíritu, "por consiguiente cree que el cuidado y el mejoramiento del cuerpo físico son una tarea tan meritoria y necesaria como el desarrollo de cualquier otro principio constituyente del hombre, porque si el cuerpo físico no está sano y bien desarrollado, la mente no puede funcionar con normalidad ni el cuerpo puede ser eficaz instrumento del espíritu", apunta la experta con once años practicando esta disciplina.
No es religión. No pocos asocian la palabra yoga a creencias religiosas "porque viene de Oriente y automáticamente hacen una relación entre hinduismo y budismo. Todos los seres iluminados, como Cristo, buscaron lo mismo: el amor y el respeto. Ambos son valores universales no es exclusividad de ninguna creencia religiosa", dice.
Igual sucede en el yoga, todas sus ramificaciones buscan lo mismo: la culminación de la práctica de esta disciplina.
Fanatismo. Cecilia es contraria al fanatismo "trae consigo una gran ignorancia. Es el momento en que dejamos de trabajar con nuestra propia conciencia, a veces nos perdemos en informaciones que no entendemos…no podemos frenarnos ni limitarnos". El yoga en su base, en su esencia permite todo, cada quien tiene su parámetro de lo bueno y lo malo.
"O tenemos los parámetros que se nos dan a lo largo de la vida, en el seno de la familia, a veces lo que aprendemos llega a ser un obstáculo porque nos cerramos. Cada quien tiene su propio camino. El ser humano debe funcionar como es la Naturaleza: nacer desarrollarse y morir".
Define el yoga como un instrumento de gran utilidad, un instrumento de autoconocimiento en todos los aspectos del ser: emocional, intelectual y físico.
¿Qué busca el yoga? Equilibrio, autoconocimiento. ¿Qué aporta? Un control de una misma, "si estoy clara en cómo vivo mis emociones, si me retraigo, si soy extrovertida, cómo reacciono en un momento difícil, cuál es mi orden…" Si se logra conectar con el interior entonces se puede compartir con cualquier otra persona, aún ésta no practique el yoga."
A diferencia de algunas religiones cuyos seguidores no suelen compartir con quienes no comparten sus creencias. No se puede aspirar a que todos pensemos y vivamos de la misma manera. Aceptación sería la palabra.
El yoga se traduce en un trabajo personal, una disciplina "y no es fácil en esta moderna era, donde nuestra vida ha llegado a depender completamente de las máquinas: nuestros hábitos alimenticios, nuestra cultura y nuestra manera de vivir son completamente artificiales".
Estamos en un avance-retroceso porque a la vez estamos acabando el mundo, destrozando la Naturaleza.
Nuestra vida se encuentra muy alejada de la naturaleza y en muchas maneras ha perdido su belleza natural. "Nuestro alimento se ha tornado en una mezcla de químicos sintéticos que lenta pero indefectiblemente producen detrimento en nuestro cuerpo y personalidad".
¿Qué se requiere? Para practicar yoga sólo se requiere de disciplina como todo en la vida. No hay edad, no hay sexo, no hay raza para el autoconocimiento ni para el cambio.
Tampoco se requiere de un lugar específico, ni de una vestimenta ni una alimentación especial. "Claro que procuramos estar cómodos y por eso recurrimos a una vestimenta cómoda y procuramos alimentarnos lo más natural posible, pero nada se impone en el yoga." Es la conciencia que lo sugiere.
Cecilia, quien se introduce al yoga porque formaba parte del entrenamiento que como bailarina debía ejecutar, se llevó una gran sorpresa tras su primera prueba: "descubrí que mi cuerpo no era tan ágil ni tan libre como pensaba".
La primera vez se desmayó de lo intensa que fue la práctica a nivel físico e interno "lejos de asustarme me dieron ganas de explorar, fue como una llamada, una alerta: ¿qué hay ahí?
Surgió la curiosidad en ella y el deseo de conocerse más.
Lleva once años practicando esta disciplina y ahora Cecilia sabe controlarse y descansar "puedo distinguir qué necesito en mi vida en todos los sentidos y una vez que soy capaz de acceder a esa experiencia, a ese control, a ese espacio, también soy capaz de dejarlo. En uno está la elección. Ahora bien, uno no puede renunciar a lo que no conoce, a lo que no se ha experimentado".
Frecuencia. El ritmo en la práctica de esta disciplina es importante, la constancia se hace necesaria. "Si como, si trabajo, si duermo todos los días, ¿por qué no darme un espacio para el yoga también?"
"Si puedo vivir el presente con cuerpo, mente y espíritu, entonces yo estoy haciendo yoga permanentemente", dice Cecilia.
Vivir el aquí y el ahora, con conciencia. De eso se trata.
Modernidad
El hombre moderno cuenta con numerosos aditamentos a su disposición para la comodidad física y el goce sensual. En este sentido, Cecilia cita como ejemplos el trabajo en una oficina, el dormir sobre un grueso y mullido colchón, "a todo sitio viaja en un carro, va al cine o a un club nocturno para distraerse, usa píldoras para dormir y otras medicinas para obtener paz, ese descanso y esa felicidad que persigue encuentra más y más tensiones tanto físicas como mentales y emocionales.
El hombre no encuentra manera alguna de deshacerse de las frustraciones y ansiedades de la sociedad".
Introducción a las Asanas
Para muchos el concepto asana (postura) tiene la connotación de ejercicios gimnásticos o de técnicas para desarrollar musculatura.
Dicho concepto está equivocado pues las asanas no fueron diseñadas para lucir el cuerpo ni para desarrollar enorme e innecesaria musculatura. Las asanas deben considerarse como posturas, posiciiones o formas de ser.
Yoga significa experiencia de la unidad, de la totalidad, o unión con el ser interior.
"Asana es una forma de ser en la cual se pueden mantener el cuerpo y la mente firmes, calmados, silenciosos, tranquilos y confortables", explica la bailarina.
En este contexto, podemos concluir que las asanas desarrollan la capacidad de mantenerse durante largos períodos en una misma posición sin sentir incomodidad, como es necesario en la meditación.
Las asanas –continúa- pueden también practicarse con fines curativos o de salud. Al estirar suavemente los músculos, dar un masaje a los órganos internos y tonificar los nervios de todo el cuerpo, se puede mejorar la salud.
La meta de las yogasanas (posturas de yoga)tiene un profundo significado y valor en el desarrollo de la personalidad, física, mental y espiritual.
¿Cuál es la diferencia? Las yogasanas se ejecutan lentamente, con relajación y concentración lo cual ejerce una influencia tanto interna como externa, de modo que el sistema nervioso, las glándulas endocrinas, los órganos internos y los músculos sean estimulados para un adecuado funcionamiento.
Los sistemas nervioso, glandular, respiratorio, excretorio y circulatorio son coordinados, lo mismo que los músculos y huesos, obteniendo un armonioso funcionamiento de cada uno.
"En resumen podemos decir que las asanas mantienen el cuerpo físico en su mejor condición y en caso de enfermedad lo estimula para que sane", apunta.
Beneficios. Con la práctica regular de las asanas desarrollamos la capacidad de mantener la estabilidad de la mente. La vida se hace fácil, y las dificultadas se convierten en oportunidades para perfeccionar la salud mental.
La palabra Yoga proviene de la raíz sanscrita yup, cuyo significado es unión, integración (de cuerpo-mente-espíritu). Unificación de sí mismo.
¿Y qué somos? "Somos mente, cuerpo y espíritu, lo que quiere decir que yoga es la unión, integración y comunicación del cuerpo, la mente y el espíritu, y cuando logramos esa unión, ese equilibrio, experimentamos un estado de paz y tranquilidad con nosotros mismos y con todo lo que nos rodea", dice Cecilia.
La ciencia del yoga se divide en varias ramas, el Hatha Yoga es aquella que parte de la filosofía yoguística que trata del cuidado, bienestar, salud y vigor del cuerpo físico. Es un sistema práctico y perfecto de auto-cultura.
El yoga implica retraer la mente del mundo objetivo para concentrarla en el mundo interior.
El yogui (quien practica yoga) sabe que el cuerpo es el templo del espíritu, "por consiguiente cree que el cuidado y el mejoramiento del cuerpo físico son una tarea tan meritoria y necesaria como el desarrollo de cualquier otro principio constituyente del hombre, porque si el cuerpo físico no está sano y bien desarrollado, la mente no puede funcionar con normalidad ni el cuerpo puede ser eficaz instrumento del espíritu", apunta la experta con once años practicando esta disciplina.
No es religión. No pocos asocian la palabra yoga a creencias religiosas "porque viene de Oriente y automáticamente hacen una relación entre hinduismo y budismo. Todos los seres iluminados, como Cristo, buscaron lo mismo: el amor y el respeto. Ambos son valores universales no es exclusividad de ninguna creencia religiosa", dice.
Igual sucede en el yoga, todas sus ramificaciones buscan lo mismo: la culminación de la práctica de esta disciplina.
Fanatismo. Cecilia es contraria al fanatismo "trae consigo una gran ignorancia. Es el momento en que dejamos de trabajar con nuestra propia conciencia, a veces nos perdemos en informaciones que no entendemos…no podemos frenarnos ni limitarnos". El yoga en su base, en su esencia permite todo, cada quien tiene su parámetro de lo bueno y lo malo.
"O tenemos los parámetros que se nos dan a lo largo de la vida, en el seno de la familia, a veces lo que aprendemos llega a ser un obstáculo porque nos cerramos. Cada quien tiene su propio camino. El ser humano debe funcionar como es la Naturaleza: nacer desarrollarse y morir".
Define el yoga como un instrumento de gran utilidad, un instrumento de autoconocimiento en todos los aspectos del ser: emocional, intelectual y físico.
¿Qué busca el yoga? Equilibrio, autoconocimiento. ¿Qué aporta? Un control de una misma, "si estoy clara en cómo vivo mis emociones, si me retraigo, si soy extrovertida, cómo reacciono en un momento difícil, cuál es mi orden…" Si se logra conectar con el interior entonces se puede compartir con cualquier otra persona, aún ésta no practique el yoga."
A diferencia de algunas religiones cuyos seguidores no suelen compartir con quienes no comparten sus creencias. No se puede aspirar a que todos pensemos y vivamos de la misma manera. Aceptación sería la palabra.
El yoga se traduce en un trabajo personal, una disciplina "y no es fácil en esta moderna era, donde nuestra vida ha llegado a depender completamente de las máquinas: nuestros hábitos alimenticios, nuestra cultura y nuestra manera de vivir son completamente artificiales".
Estamos en un avance-retroceso porque a la vez estamos acabando el mundo, destrozando la Naturaleza.
Nuestra vida se encuentra muy alejada de la naturaleza y en muchas maneras ha perdido su belleza natural. "Nuestro alimento se ha tornado en una mezcla de químicos sintéticos que lenta pero indefectiblemente producen detrimento en nuestro cuerpo y personalidad".
¿Qué se requiere? Para practicar yoga sólo se requiere de disciplina como todo en la vida. No hay edad, no hay sexo, no hay raza para el autoconocimiento ni para el cambio.
Tampoco se requiere de un lugar específico, ni de una vestimenta ni una alimentación especial. "Claro que procuramos estar cómodos y por eso recurrimos a una vestimenta cómoda y procuramos alimentarnos lo más natural posible, pero nada se impone en el yoga." Es la conciencia que lo sugiere.
Cecilia, quien se introduce al yoga porque formaba parte del entrenamiento que como bailarina debía ejecutar, se llevó una gran sorpresa tras su primera prueba: "descubrí que mi cuerpo no era tan ágil ni tan libre como pensaba".
La primera vez se desmayó de lo intensa que fue la práctica a nivel físico e interno "lejos de asustarme me dieron ganas de explorar, fue como una llamada, una alerta: ¿qué hay ahí?
Surgió la curiosidad en ella y el deseo de conocerse más.
Lleva once años practicando esta disciplina y ahora Cecilia sabe controlarse y descansar "puedo distinguir qué necesito en mi vida en todos los sentidos y una vez que soy capaz de acceder a esa experiencia, a ese control, a ese espacio, también soy capaz de dejarlo. En uno está la elección. Ahora bien, uno no puede renunciar a lo que no conoce, a lo que no se ha experimentado".
Frecuencia. El ritmo en la práctica de esta disciplina es importante, la constancia se hace necesaria. "Si como, si trabajo, si duermo todos los días, ¿por qué no darme un espacio para el yoga también?"
"Si puedo vivir el presente con cuerpo, mente y espíritu, entonces yo estoy haciendo yoga permanentemente", dice Cecilia.
Vivir el aquí y el ahora, con conciencia. De eso se trata.
Modernidad
El hombre moderno cuenta con numerosos aditamentos a su disposición para la comodidad física y el goce sensual. En este sentido, Cecilia cita como ejemplos el trabajo en una oficina, el dormir sobre un grueso y mullido colchón, "a todo sitio viaja en un carro, va al cine o a un club nocturno para distraerse, usa píldoras para dormir y otras medicinas para obtener paz, ese descanso y esa felicidad que persigue encuentra más y más tensiones tanto físicas como mentales y emocionales.
El hombre no encuentra manera alguna de deshacerse de las frustraciones y ansiedades de la sociedad".
Introducción a las Asanas
Para muchos el concepto asana (postura) tiene la connotación de ejercicios gimnásticos o de técnicas para desarrollar musculatura.
Dicho concepto está equivocado pues las asanas no fueron diseñadas para lucir el cuerpo ni para desarrollar enorme e innecesaria musculatura. Las asanas deben considerarse como posturas, posiciiones o formas de ser.
Yoga significa experiencia de la unidad, de la totalidad, o unión con el ser interior.
"Asana es una forma de ser en la cual se pueden mantener el cuerpo y la mente firmes, calmados, silenciosos, tranquilos y confortables", explica la bailarina.
En este contexto, podemos concluir que las asanas desarrollan la capacidad de mantenerse durante largos períodos en una misma posición sin sentir incomodidad, como es necesario en la meditación.
Las asanas –continúa- pueden también practicarse con fines curativos o de salud. Al estirar suavemente los músculos, dar un masaje a los órganos internos y tonificar los nervios de todo el cuerpo, se puede mejorar la salud.
La meta de las yogasanas (posturas de yoga)tiene un profundo significado y valor en el desarrollo de la personalidad, física, mental y espiritual.
¿Cuál es la diferencia? Las yogasanas se ejecutan lentamente, con relajación y concentración lo cual ejerce una influencia tanto interna como externa, de modo que el sistema nervioso, las glándulas endocrinas, los órganos internos y los músculos sean estimulados para un adecuado funcionamiento.
Los sistemas nervioso, glandular, respiratorio, excretorio y circulatorio son coordinados, lo mismo que los músculos y huesos, obteniendo un armonioso funcionamiento de cada uno.
"En resumen podemos decir que las asanas mantienen el cuerpo físico en su mejor condición y en caso de enfermedad lo estimula para que sane", apunta.
Beneficios. Con la práctica regular de las asanas desarrollamos la capacidad de mantener la estabilidad de la mente. La vida se hace fácil, y las dificultadas se convierten en oportunidades para perfeccionar la salud mental.
Diario Libre


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