La hernia discal cervical mejora en un 90%
Yohanna Hilario
Santo Domingo. La vi en la cama del hospital y pensé, "crónica de una enfermedad anunciada". María Pichardo se veía bien, pero se quejaba constantemente de estar muy cansada y adolorida.
Un día amaneció con un dolor en el cuello, tomó varios calmantes y continuó con su faena. El dolor no cedió, se agravó y esa noche no pudo dormir. Le dolía el cuello, la espalda y el antebrazo derecho. Era como si su cuello no quisiera sostener su cabeza y su brazo sólo pedía la posición hacia arriba para aliviar un poco el malestar.
A primera hora de la mañana siguiente, la mujer visitó un experto en la salud que le diagnosticó una fuerte reacción por estrés, le aconsejó estar tranquila y tomar algunos medicamentos. A los dos días regresó a su médico, visiblemente deshidratada, con menos peso, con el mismo dolor, éste le indicó internamiento, un TAC craneal y un estudio de resonancia magnética, esta última reveló una pequeña masa alojada entre las vértebras, dicha masa era un disco roto cuyos fragmentos estaban rozando la médula: Hernia Discal Cervical.
Según el cirujano de columna, Piero Perrone, del Hospital General de la Plaza de la Salud, las causas de la hernia discal cervical son desconocidas, sin embargo, se asocian a la herencia, traumas... muy frecuente en deportistas de gran impacto.
"Aunque la parte baja (región lumbar) de la columna es el área más común para una hernia de disco, los discos cervicales (del cuello) resultan afectados en un pequeño porcentaje, un 20% de las visita a mi consultorio es por causa de esta patología", explica.
Perrone destaca algunos de los síntomas de emergencia como son: dolor en el cuello, la espalda, dolor que irradia hacia abajo en dirección del brazo, entumecimiento u hormigueo en el hombro o brazo. ¿Duele? "Sí, deja un tortícolis muy doloroso. No se puede dormir más que sentado".
Diagnóstico y tratamiento
El galeno afirma que el análisis por excelencia para un buen diagnóstico es la resonancia magnética. Un examen físico y el historial clínico siempre es el primer paso. La resonancia magnética es un estudio seguro e indoloro.
"Un buen tratamiento a tiempo arrojará un pronóstico de hasta un 90% de mejoría en el paciente. El primer tratamiento para una hernia discal es reposo con analgésicos y relajante muscular, seguidos de fisioterapia. La mayoría de las personas que siguen estos tratamientos se recuperarán y vuelven a sus actividades cotidianas. Una opción para operar se da cuando los síntomas no se pueden controlar con medicamentos ni terapias físicas, y en el peor de los casos por parálisis de alguna extremidad", explica el experto.
Los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a prevenir la enfermedad de disco cervical, pues es recomendable empezar desde ahora a adoptar hábitos que le ayuden a conservar su columna para toda la vida.
Un día amaneció con un dolor en el cuello, tomó varios calmantes y continuó con su faena. El dolor no cedió, se agravó y esa noche no pudo dormir. Le dolía el cuello, la espalda y el antebrazo derecho. Era como si su cuello no quisiera sostener su cabeza y su brazo sólo pedía la posición hacia arriba para aliviar un poco el malestar.
A primera hora de la mañana siguiente, la mujer visitó un experto en la salud que le diagnosticó una fuerte reacción por estrés, le aconsejó estar tranquila y tomar algunos medicamentos. A los dos días regresó a su médico, visiblemente deshidratada, con menos peso, con el mismo dolor, éste le indicó internamiento, un TAC craneal y un estudio de resonancia magnética, esta última reveló una pequeña masa alojada entre las vértebras, dicha masa era un disco roto cuyos fragmentos estaban rozando la médula: Hernia Discal Cervical.
Según el cirujano de columna, Piero Perrone, del Hospital General de la Plaza de la Salud, las causas de la hernia discal cervical son desconocidas, sin embargo, se asocian a la herencia, traumas... muy frecuente en deportistas de gran impacto.
"Aunque la parte baja (región lumbar) de la columna es el área más común para una hernia de disco, los discos cervicales (del cuello) resultan afectados en un pequeño porcentaje, un 20% de las visita a mi consultorio es por causa de esta patología", explica.
Perrone destaca algunos de los síntomas de emergencia como son: dolor en el cuello, la espalda, dolor que irradia hacia abajo en dirección del brazo, entumecimiento u hormigueo en el hombro o brazo. ¿Duele? "Sí, deja un tortícolis muy doloroso. No se puede dormir más que sentado".
Diagnóstico y tratamiento
El galeno afirma que el análisis por excelencia para un buen diagnóstico es la resonancia magnética. Un examen físico y el historial clínico siempre es el primer paso. La resonancia magnética es un estudio seguro e indoloro.
"Un buen tratamiento a tiempo arrojará un pronóstico de hasta un 90% de mejoría en el paciente. El primer tratamiento para una hernia discal es reposo con analgésicos y relajante muscular, seguidos de fisioterapia. La mayoría de las personas que siguen estos tratamientos se recuperarán y vuelven a sus actividades cotidianas. Una opción para operar se da cuando los síntomas no se pueden controlar con medicamentos ni terapias físicas, y en el peor de los casos por parálisis de alguna extremidad", explica el experto.
Los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a prevenir la enfermedad de disco cervical, pues es recomendable empezar desde ahora a adoptar hábitos que le ayuden a conservar su columna para toda la vida.
Yohanna Hilario
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