"Marley y yo": una vida de perros

SANTO DOMINGO. De los animales domésticos, el perro es el número uno; le siguen el gato, las aves y los hamsters. Se dice que un perro no tendría conciencia de sí mismo, por tanto su comportamiento está determinado por la convivencia con los humanos y en especial de aquél que considera líder de la manada, ya sea por que le da de comer o porque impone su autoridad.
Esta película dedica su relato a la relación entre una familia y un perro. El argumento no es nuevo, sin embargo, su punto de vista establece la diferencia, al profundizar en los sentimientos que puede generar un animal en el ciclo de su vida, más corta que la de los humanos.
La historia
John y Jennifer son jóvenes periodistas que deciden casarse y mudarse a Miami. El natural deseo de tener hijos de Jennifer provoca el pánico en John; para neutralizar la necesidad de dar afecto en su pareja decide regalarle un perro. Un lindo cachorro irá poco a poco creciendo, pero la pareja será incapaz de mantener autoridad y sufrirá los desastres que el can provoca.
Incontables incidentes suceden y la pareja termina adaptándose al perro mal criado. La llegada de los hijos va complicando el relato, al tiempo que la vida profesional de la pareja va estabilizándose. John se convierte en cronista de un periódico, cuya muy leída columna tiene como personaje principal precisamente a Marley, el perro.
Los protagonistas
El filme es protagonizado por Owen Wilson y Jennifer Aniston, figuras que pasan por un muy buen momento en la industria. Ambos consiguen un buen tono en la interpretación.
La caracterización de Wilson como marido dedicado a satisfacer en todo a su mujer es convincente; por su lado, Jennifer Aniston logra intensidad como madre estresada por una familia en crisis de crecimiento.
El mejor amigo de John es Sebastian (Eric Dane), reportero de éxito, que representa lo contrario de John, es decir, el soltero mujeriego que viaja por el mundo en busca de aventuras. La relación entre estos amigos da pie al contraste entre la permanente disyuntiva del varón, aceptar la vida conyugal con todas sus facetas u optar por la soltería. Punto aparte son los diferentes perros que participan para dar vida a Marley, el perro labrador en sus distintas etapas, cosa que sus entrenadores logran a cabalidad.
El guión
Se trata de un relato basado en las memorias de John Grogan, periodista norteamericano que en el 2005 editó un libro de cierta fama. Su adaptación al cine no esperó mucho. La escritura de este guión es un muy buen ejemplo de cómo es posible desarrollar una historia dinámica y entretenida con solo tres personajes protagonistas - la pareja y el perro - ya que los demás que participan en la historia son personajes de segundo y tercer orden.
Lo más interesante es que transita de la comedia romántica a la comedia dramática. De la etapa del noviazgo de la pareja pasamos gradualmente a la llegada de los hijos y la natural vejez del perro, donde el humor da paso a la reflexión en torno a la vida y el modo de transitarla.
Si bien es cierto se trata de una película modesta en sus objetivos dramáticos, logra plenamente sus metas, abriendo espacio para una dimensión humana más profunda de lo que habitualmente encontramos en la comedia liviana norteamericana. Recomendable para quienes tienen un perro y para quienes están en la duda de si el perro o los hijos. Encontrarán argumentos tanto a favor como en contra, cosa que al cine en cuanto arte le queda muy bien.
Ficha Técnica
Marley & Me. EE.UU. 2008 , 115 minutos.
Dirección: David Frankel
Guión: Scott Frank, Don Roos basados en el relato de John Grogan
Música: Theodore Shapiro
Fotografía: Florian Ballhaus
Intérpretes:
Owen Wilson, Jennifer Aniston,
Eric Dane, Alan Arkin
Mario Núñez Muñoz
Mario Núñez Muñoz