Guardarropa: descubre tu paleta de colores

Tener en claro la paleta de colores personal es fundamental para crear un guardarropa armonioso y que refleje tu estilo de manera coherente. Aquí hay algunos pasos para ayudarte a identificar tus colores ideales:

Observa tus colores naturales. Comienza observando los colores naturales de tu piel, cabello y ojos en diferentes tipos de luz. Esto te dará una idea de los colores que complementan tu tono de piel.

Identifica si eres cálido o frío. La mayoría de las personas caen en una de estas dos categorías. Las personas con tonos de piel cálidos tienden a tener venas verdes en las muñecas y se ven mejor con colores cálidos como amarillos, naranjas, rojos y tonos tierra. Aquellas con tonos de piel fríos suelen tener venas azules en las muñecas y se ven favorecidas por colores fríos como azules, verdes, morados y rosados.

Determina tu subtono. Dentro de las categorías de cálido y frío, puedes tener un subtono. Por ejemplo, si eres cálida, puedes tener un subtono dorado (te sientan bien los colores cálidos con matices dorados) o un subtono oliva (te favorecen los colores cálidos con matices verdes). Si eres fría, puedes tener un subtono rosa (te quedan mejor los colores fríos con matices rosados) o un subtono azul (los colores fríos con matices azules son ideales para ti).

Prueba diferentes colores. Experimenta con diferentes prendas de colores y observa cómo te hacen sentir y cómo resaltan tus rasgos. Puedes hacer esto en una tienda de ropa o simplemente sosteniendo diferentes prendas cerca de tu rostro en casa.

Obtén una paleta de colores. Una vez que hayas identificado tus colores ideales, crea una paleta de colores personalizada. Esto puede ser una selección de 10-15 colores que te sienten especialmente bien y que combinen entre sí. Estos serán los colores principales de tu guardarropa.

Usa colores complementarios. Además de tu paleta principal, puedes agregar algunos colores complementarios que no sean necesariamente tus mejores colores, pero que aún te gusten y que funcionen bien con tu paleta principal.

Sé coherente. A medida que compras ropa nueva, trata de mantener tu paleta de colores en mente. Esto te ayudará a crear un guardarropa armonioso en el que las prendas se complementen entre sí.

Experimenta con estampados y texturas. No todos los colores tienen que ser sólidos. También puedes incorporar estampados y texturas que incluyan tus colores ideales.

Adapta tu paleta a diferentes ocasiones. Considera cómo puedes adaptar tu paleta de colores a diferentes situaciones, como atuendos de trabajo, ropa casual y ocasiones especiales.

Reevalúa periódicamente. Tu paleta de colores puede evolucionar con el tiempo, así que no dudes en reevaluarla de vez en cuando y hacer ajustes según sea necesario.

Dar con tu paleta de colores personal puede hacer que sea mucho más fácil tomar decisiones de moda y garantizar que te veas y te sientas mejor con tu ropa. Además, te ayudará a construir un guardarropa versátil y armonioso.

Diario Libre

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