Mujeres talentosas se unen para rendir tributo a La Lupe en diciembre
Susana Silfa, Ruth la Cantante, Sabrina Estepan, Karina Aguasvivas, Sonya Peña y Keren Dinzey encabezan el homenaje a La Lupe en Lungomare

(SUMINISTRADA)
Por solicitud del público, este martes 9 de diciembre el escenario de Lungomare Bar and Lounge vibrará con un homenaje dedicado a la inigualable y controversial cantante cubana La Lupe, ícono indomable del soul latino, la irreverencia y la pasión hecha voz.
Detalles del homenaje a La Lupe
Bajo la producción de Marina Frías y Carlos Echenique, seis destacadas mujeres del canto y la actuación se reunirán en una noche cargada de emoción y fuerza escénica.
El show contará con participación de Susana Silfa, Ruth la Cantante, Sabrina Estepan, Karina Aguasvivas, Sonya Peña y Keren Dinzey. Cada artista interpretará clásicos inmortalizados por "La Yiyiyi", en un recorrido musical y teatral por su legado.
Artistas que participarán en el tributo a La Lupe
El espectáculo promete una experiencia de alto voltaje interpretativo, celebrando la obra de una mujer que desafió normas y escenarios y cuya huella permanece en la historia musical latinoamericana.
La presentación está programada para el martes 9 de diciembre, a las 9:00 de la noche, en Lungomare Bar and Lounge.
Lupe Victoria Yolí Raymond
(Santiago de Cuba, 23 de diciembre de 1939 – El Bronx, Nueva York, 29 de febrero de 1992), conocida como La Lupe, fue una de las voces más intensas y singulares de la música latina. Inició su carrera en La Habana junto al Trío Tropicuba y se hizo famosa por su estilo enérgico y teatral.
Exiliada tras la llegada del régimen de Fidel Castro, pasó por México y luego se estableció en Nueva York, donde Mongo Santamaría la lanzó a la escena latina. Su etapa junto a Tito Puente en Tico Records la convirtió en una estrella comparable, e incluso superior en popularidad, a Celia Cruz durante los años sesenta.
Su vida personal turbulenta, problemas económicos, conflictos profesionales y la llegada de Celia Cruz a Fania Records precipitaron su declive. Intentó retornar a finales de los setenta, pero sin éxito. Se retiró en 1980 y, en los años ochenta, se convirtió al evangelismo, grabando música religiosa.
La Lupe murió en 1992, a los 52 años, víctima de un infarto fulminante. Su legado permanece como uno de los más intensos y controvertidos de la música latina.


