La cultura del Hip Hop en República Dominicana
El Hip Hop es un gremio de cuatro corrientes artísticas: grafiti, discjockey, rap y baile; todas unidas por el carácter urbano y el deseo de un artista para expresarse con libertad. Hemos seleccionado a Erick Guzmán, Jadux Urbano y Dio Félix como portavoces de este género, quienes nos cuentan su experiencia dentro de un estilo de vida que además se ha radicado en la cultura dominicana
Erwin Villanueva
Durante los años setenta, los barrios de Nueva York en los que habitaba la población afroamericana menos privilegiada se convirtieron en los anfitriones de inmigrantes latinos, quienes ya tenían sus costumbres y su música. De ahí surge una fusión musical. En ese entonces la comunidad negra tenía una profunda fascinación por la música funk de artistas como los Jackson 5, James Brown y The Gang, que era bailada en los clubes más prestigiosos de la ciudad y en los que ellos no eran bienvenidos (la discriminación racial era muy marcada).
Es así como ambas culturas crean los llamados “block parties” o fiestas de barrio que realizaban en plena calle. Entonces, por primera vez, aparecen los cuatro elementos característicos del Hip Hop: el que ponía la música o discjockey, un animador o presentador (MC), quienes le hacían la publicidad a la fiesta pintando murales (grafiteros) y el que bailaba en medio de la actividad (B-Boys o bailarines).
En RD hemos asumido esta cultura con fuerza. Creció entre prejuicios y se mantuvo allí por años. Ahora es un género que resurge y congrega a cientos y cientos de jóvenes dominicanos con talento innato y que lo identifican como una plataforma para expresarse.
Una danza urbana dominicana
En 2016 nace una versión criolla de la danza urbana. A partir del “Proyecto de danza Royalty Dance Crew” que buscaba exponer a una nueva generación de bailarines urbanos ante los ojos del mundo, Guzmán desarrolló el “Blooddance”, un género que hace referencia a la mezcla de razas adjuntas a nuestra identidad como dominicanos.
“Como alumno egresado de la primera promoción de hombres de la Escuela Nacional de Danza, he conocido de cerca nuestras danzas y música tradicionales de la mano de maestras como Maritza Reyes y Manuela Feliz”, explica. De esa forma, el nuevo estilo puede considerarse como un mediador entre los jóvenes y el folklore dominicano, pues integra movimientos característicos de nuestra danza tradicional y que provienen de la cultura africana, española y taíno arahuaco.
El Blooddance está construido por fundamentos descritos en idioma arahuaco con el objetivo de mantener en vigencia lo que heredamos de la comunidad taína. Uno de ellos es el “Opius”, que se refiere a la fuerza interna y a la proyección del alma al bailar. Otro es el “Ri” –la expresión física del ‘Opius’– que corresponde a la fuerza física al bailar. La cadencia de las caderas fue denominada por Guzmán como “Yokahu”. También integra movimientos del pecho conocidos como “Nacan”.
“Los dominicanos llevamos el baile en la sangre”, cita Guzmán, y el objetivo del Blooddance es, precisamente, mantener viva dicha creencia.
Algo más sobre el grafiti
El grafiti tiene una parte importante y es que se trata de un medio de comunicación personalizado, en el que los artistas expresan, no solo lo que piensan, sino que pueden elegir un ambiente determinado para dejar grabado su mensaje. Ellos se apoderan de las paredes abandonadas o solicitan un permiso a las que tienen propietario, de esa forma cuentan con todo un catálogo de opciones para utilizar como lienzo en los muros de Santo Domingo.
Las obras de Félix habitan en la av. Independencia, Churchill; en el Malecón, en la autopista de San Isidro, autopista de Las Américas y en el puente Duarte. Cada una tiene el propósito principal de “crear un impacto en la percepción y estado de ánimo de los transeúntes”, nos cuenta.
“Ser grafitero no es tan sencillo a decir verdad; aunque se obtienen más beneficios que en tiempos anteriores, vivir de esto es un tanto cuesta arriba por los materiales, que no todo al que le apasiona puede costear”, explica. Sin embargo, insiste en que “cada grafiti es una nueva oportunidad para el artista de crear su propia historia con formas y colores”.
¿Cómo perciben la cultura Hip Hop actualmente en RD?
Jadux: Percibo mucha hambre por parte del público y de los que hacen cualquier cosa dentro del Hip Hop: los grafiteros están muralizando el país, los BBoys (break-boys) están buscando presentaciones para bailar en muchas actividades, los MCs cada día están con más ganas de escribir raps, de participar en competencias de freestyle, en conciertos. La cultura Hip Hop está creciendo para bien.
Erick: Como miembro del Ballet Nacional Dominicano que soy, puedo dar fe de la diferencia entre bailarines de un área y otra. Nuestro gremio de artistas urbanos debe enfocarse y crecer para ser más respetados y estar mejor valorados.
Dio: El grafiti en RD es la forma más espontánea y libre del arte actual, sin límites y en constante crecimiento.
¿Hay algún obstáculo que está enfrentando?
Jadux: El mayor obstáculo es el monetario por parte de las empresas, marcas y productos. Económicamente, no hay mucho apoyo para realizar conciertos o eventos, para costearse un álbum, un videoclip, etc. Aparte, el Hip Hop sigue viéndose como el género artístico que eligen los vagos, incultos y delincuentes, cuando es justamente lo contrario.
Erick: Ser bailarín o estar envuelto en el mundo del Hip Hop es ser marginado por estereotipos y prototipos creados por la sociedad de que “la calle” es mala. Sin embargo, las calles y academias relativas a esta cultura están llenas de jóvenes con talento y con ganas de crecer y aprender.
Dio: Está más aceptado pero aún se sigue vinculando a la delincuencia, la alteración del orden público y demás. También hay una falta de valoración por parte de las élites artísticas; si nos abren las puertas se podrían lograr grandes cosas en el arte dominicano.
¿Por qué creen que es importante apoyar el género del Hip Hop?
Jadux: Esta es la mejor alternativa, eficaz, creativa y saludable a muchos males sociales actuales, como la delincuencia, la deserción estudiantil o la esclavitud de estar mal empleado toda tu vida en un trabajo que odias. El Hip Hop sienta sus bases sobre el respeto. Con el apoyo suficiente tendremos a una gran masa de jóvenes influenciados por las letras de raperos cuya aura musical se basa en el respeto.
Erick: El Hip Hop, en cualquiera de sus formas (la música, la escritura, el movimiento y el rap), así como el ballet, la danza contemporánea o el merengue, son expresiones culturales y artísticas que le dan vida e identidad a una sociedad, a un país, y por el simple hecho de que existan jóvenes sumergidos en estas áreas hay que apoyar y orientar de manera positiva para obtener resultados positivos. No apoyar una expresión artística o cultural es apoyar una sociedad gris, sin vida, sin color.
Dio: Apoyarlo es como un identificativo de expresión y de cómo los jóvenes comunican sus vivencias, y cómo han podido lograr cosas a través de las mismas.
Primero fue espectador de los videos musicales de Eminem, 50 cent, Snoop Dog, Ice Cube y Will Smith. En lo adelante decidió iniciar su carrera como bailarín en 2009 incorporándose a la academia Ballet Teatro Dominicano donde tomaba clases de house dance, break dance, popping, dancehall y freestyle. En 2012 – y antes de graduarse de la Escuela Nacional de Danza– entró al Ballet Nacional Dominicano, del que es miembro actualmente. Ese mismo año lanzó el grupo de baile “Royalty”, con el que se dio a conocer tanto a nivel nacional como internacional. Fue la primera representación de RD en el campeonato mundial de danza urbana “Hip Hop International”, que se celebra en Las Vegas (Nevada) todos los años. Este año asume el rol de coreógrafo asistente en los premios Soberano.
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Jadux Urbano
DJ, MC (mic controller) y productor de música urbana
24 años
Algo más sobre el grafiti
El grafiti tiene una parte importante y es que se trata de un medio de comunicación personalizado, en el que los artistas expresan, no solo lo que piensan, sino que pueden elegir un ambiente determinado para dejar grabado su mensaje. Ellos se apoderan de las paredes abandonadas o solicitan un permiso a las que tienen propietario, de esa forma cuentan con todo un catálogo de opciones para utilizar como lienzo en los muros de Santo Domingo.
Las obras de Félix habitan en la av. Independencia, Churchill; en el Malecón, en la autopista de San Isidro, autopista de Las Américas y en el puente Duarte. Cada una tiene el propósito principal de “crear un impacto en la percepción y estado de ánimo de los transeúntes”, nos cuenta.
“Ser grafitero no es tan sencillo a decir verdad; aunque se obtienen más beneficios que en tiempos anteriores, vivir de esto es un tanto cuesta arriba por los materiales, que no todo al que le apasiona puede costear”, explica. Sin embargo, insiste en que “cada grafiti es una nueva oportunidad para el artista de crear su propia historia con formas y colores”.
¿Cómo perciben la cultura Hip Hop actualmente en RD?
Jadux: Percibo mucha hambre por parte del público y de los que hacen cualquier cosa dentro del Hip Hop: los grafiteros están muralizando el país, los BBoys (break-boys) están buscando presentaciones para bailar en muchas actividades, los MCs cada día están con más ganas de escribir raps, de participar en competencias de freestyle, en conciertos. La cultura Hip Hop está creciendo para bien.
Erick: Como miembro del Ballet Nacional Dominicano que soy, puedo dar fe de la diferencia entre bailarines de un área y otra. Nuestro gremio de artistas urbanos debe enfocarse y crecer para ser más respetados y estar mejor valorados.
Dio: El grafiti en RD es la forma más espontánea y libre del arte actual, sin límites y en constante crecimiento.
¿Hay algún obstáculo que está enfrentando?
Jadux: El mayor obstáculo es el monetario por parte de las empresas, marcas y productos. Económicamente, no hay mucho apoyo para realizar conciertos o eventos, para costearse un álbum, un videoclip, etc. Aparte, el Hip Hop sigue viéndose como el género artístico que eligen los vagos, incultos y delincuentes, cuando es justamente lo contrario.
Erick: Ser bailarín o estar envuelto en el mundo del Hip Hop es ser marginado por estereotipos y prototipos creados por la sociedad de que “la calle” es mala. Sin embargo, las calles y academias relativas a esta cultura están llenas de jóvenes con talento y con ganas de crecer y aprender.
Dio: Está más aceptado pero aún se sigue vinculando a la delincuencia, la alteración del orden público y demás. También hay una falta de valoración por parte de las élites artísticas; si nos abren las puertas se podrían lograr grandes cosas en el arte dominicano.
¿Por qué creen que es importante apoyar el género del Hip Hop?
Jadux: Esta es la mejor alternativa, eficaz, creativa y saludable a muchos males sociales actuales, como la delincuencia, la deserción estudiantil o la esclavitud de estar mal empleado toda tu vida en un trabajo que odias. El Hip Hop sienta sus bases sobre el respeto. Con el apoyo suficiente tendremos a una gran masa de jóvenes influenciados por las letras de raperos cuya aura musical se basa en el respeto.
Erick: El Hip Hop, en cualquiera de sus formas (la música, la escritura, el movimiento y el rap), así como el ballet, la danza contemporánea o el merengue, son expresiones culturales y artísticas que le dan vida e identidad a una sociedad, a un país, y por el simple hecho de que existan jóvenes sumergidos en estas áreas hay que apoyar y orientar de manera positiva para obtener resultados positivos. No apoyar una expresión artística o cultural es apoyar una sociedad gris, sin vida, sin color.
Dio: Apoyarlo es como un identificativo de expresión y de cómo los jóvenes comunican sus vivencias, y cómo han podido lograr cosas a través de las mismas. l
Erick Guzmán
Bailarín y coreógrafo
26 años
Primero fue espectador de los videos musicales de Eminem, 50 cent, Snoop Dog, Ice Cube y Will Smith. En lo adelante decidió iniciar su carrera como bailarín en 2009 incorporándose a la academia Ballet Teatro Dominicano donde tomaba clases de house dance, break dance, popping, dancehall y freestyle. En 2012 – y antes de graduarse de la Escuela Nacional de Danza– entró al Ballet Nacional Dominicano, del que es miembro actualmente. Ese mismo año lanzó el grupo de baile “Royalty”, con el que se dio a conocer tanto a nivel nacional como internacional. Fue la primera representación de RD en el campeonato mundial de danza urbana “Hip Hop International”, que se celebra en Las Vegas (Nevada) todos los años. Este año asume el rol de coreógrafo asistente en los premios Soberano.
“Desde joven me involucré, a través de un vecino bastante mayor que yo, que escuchaba rap y que subía a mi casa para escucharlo con mi hermano mayor”, revela Jadux Urbano, un madrileño de 24 años que reside en Santo Domingo desde 2012 y ha hecho suyo el escenario de música urbana local. Ha sido colaborador de artistas nacionales como “Yakirt” de Circuito Negro, Stros el Psicóloco, Kashmir Jones y “Experiencia” de Lo Correcto.
En 2016 fue el DJ oficial de “Mi nombre es Kashmir Jones”, el evento de rap local más grande en RD. Actualmente forma parte del próximo proyecto musical de Stros el Psicóloco.
Su estilo como grafitero es una mezcla del conocimiento que adquirió del arte plástico. Dio Félix considera su arte urbano más refinado y conceptual gracias a que ha recorrido, por 13 años, diferentes técnicas y elementos artísticos.
Desde que se inició en el grafiti hasta hoy, este tipo de arte ha
cambiado. “Se podría decir que, en cuanto a la percepción de las masas,
ha crecido en aceptación. Como expresión artística se ha enriquecido de diversas técnicas, conocimientos, elementos y exigencias propias del artista para así ofrecer una pieza a la vanguardia”, dice.
Es propietario de Garabato RD, un taller de creatividad y diseño
que lo ha dado a conocer a nivel nacional.
“El grafiti en RD es la forma más espontánea y libre del arte actual, sin límites y en constante crecimiento”
Erwin Villanueva
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