Sahara, una película fatal hecha contra Penélope Cruz
Entre los aspectos más deplorables está la música

Santo Domingo. Pastiche es el término que los franceses encontraron para dar nombre a aquellas obras en que se utilizan elementos de artistas conocidos para hacerlas pasar como creaciones nuevas; es decir, gato por libre. Nada más apropiado para definir esta producción, Sahara, que mezcla elementos ya vistos en otras películas de aventuras. Un barco de la Guerra Civil norteamericana en el lecho seco de un río africano es el gancho de inicio. Le siguen una epidemia con posibilidades globales, un dictador asesino en Mali, una industria contaminante, un tibio romance entre un buscador de tesoros y una muy seria doctora entregada a la causa de la salud en Africa.
De todo para poco
El filme tiene literalmente de todo en términos de producción, lugares exóticos, barcos, botes, tanques, helicópteros, aviones, trenes, carros, camellos. Mucho movimiento y poca acción cinematográfica, contradicción que evidencia lo pobre del relato frente a la inversión en recursos. En términos dramáticos el filme flaquea al presentar una dupla de héroes al estilo Quijote y Sancho Panza, pero estilizados en demasía. Matthew McConaughey y Steve Zahn se esfuerzan por dar sustancia a un guión liviano que poco les ayuda. Quizá la televisión pesa demasiado en este filme, ya que tanto su director como gran parte del elenco provienen de ella y mucho de la narración para ese medio se evidencia en la realización, especialmente en los diálogos.
La actriz y su cruz
Penélope Cruz encarna a la doctora Eva Rojas, médico de una organización internacional en misión humanitaria, que rescatada por el fornido galán caerá en sus brazos luego de mil peripecias. Sin embargo, de más a menos va Cruz en esta producción, con muchas líneas al comienzo del libreto, pero según avanza la película sus parlamentos van disminuyendo en cantidad y también en calidad, para llegar a un deplorable final feliz. Ya le habíamos visto interpretar a una joven griega en ¨La mandolina del capitán Corelli¨ y llegamos a pensar que dicha experiencia bastaba para dejar de lado las producciones de los grandes estudios. Por ello surge la pregunta ¿Por qué una actriz de talento y trayectoria acepta filmar una película cuyo guión le exige matar un soldado africano por la espalda? La respuesta debe estar en el contrato que la actriz tiene y que probablemente la obliga a filmar determinada cantidad de filmes en un año. Ello de todas maneras no explica el evidente deterioro de su imagen ante el público.
Todavía más
Pero el aspecto más deplorable del filme es su musicalización. Un compendio de rock pop africano, que debe estar entre lo peor del world music, se utiliza como ambientación, intentando dar un sabor local que solo contribuye a una imagen tipo maqueta acerca de la sociedad africana y sus conflictos. Recomendable para constatar que no todo lo que brilla es oro y que Penélope ya no es la última cocacola del desierto.
Sahara
Dirección: Breck Eisner
Guión: Thomas Dean Donnelly, J. Oppenheimer, John C. Richard, James V. Hart
Música: Allen Collins, Clint Mansell, Ronnie Van Zant
Intérpretes:
Penélope Cruz
William H. Macy
Matthew McConaughey
Rainn Wilson
Steve Zahn
De todo para poco
El filme tiene literalmente de todo en términos de producción, lugares exóticos, barcos, botes, tanques, helicópteros, aviones, trenes, carros, camellos. Mucho movimiento y poca acción cinematográfica, contradicción que evidencia lo pobre del relato frente a la inversión en recursos. En términos dramáticos el filme flaquea al presentar una dupla de héroes al estilo Quijote y Sancho Panza, pero estilizados en demasía. Matthew McConaughey y Steve Zahn se esfuerzan por dar sustancia a un guión liviano que poco les ayuda. Quizá la televisión pesa demasiado en este filme, ya que tanto su director como gran parte del elenco provienen de ella y mucho de la narración para ese medio se evidencia en la realización, especialmente en los diálogos.
La actriz y su cruz
Penélope Cruz encarna a la doctora Eva Rojas, médico de una organización internacional en misión humanitaria, que rescatada por el fornido galán caerá en sus brazos luego de mil peripecias. Sin embargo, de más a menos va Cruz en esta producción, con muchas líneas al comienzo del libreto, pero según avanza la película sus parlamentos van disminuyendo en cantidad y también en calidad, para llegar a un deplorable final feliz. Ya le habíamos visto interpretar a una joven griega en ¨La mandolina del capitán Corelli¨ y llegamos a pensar que dicha experiencia bastaba para dejar de lado las producciones de los grandes estudios. Por ello surge la pregunta ¿Por qué una actriz de talento y trayectoria acepta filmar una película cuyo guión le exige matar un soldado africano por la espalda? La respuesta debe estar en el contrato que la actriz tiene y que probablemente la obliga a filmar determinada cantidad de filmes en un año. Ello de todas maneras no explica el evidente deterioro de su imagen ante el público.
Todavía más
Pero el aspecto más deplorable del filme es su musicalización. Un compendio de rock pop africano, que debe estar entre lo peor del world music, se utiliza como ambientación, intentando dar un sabor local que solo contribuye a una imagen tipo maqueta acerca de la sociedad africana y sus conflictos. Recomendable para constatar que no todo lo que brilla es oro y que Penélope ya no es la última cocacola del desierto.
Sahara
Dirección: Breck Eisner
Guión: Thomas Dean Donnelly, J. Oppenheimer, John C. Richard, James V. Hart
Música: Allen Collins, Clint Mansell, Ronnie Van Zant
Intérpretes:
Penélope Cruz
William H. Macy
Matthew McConaughey
Rainn Wilson
Steve Zahn
Mario Núñez Muñoz
Mario Núñez Muñoz