Te admiro
Admito que me cuesta admirar. Siempre he pensado que cada quien debe hacer lo que hace lo mejor posible y eso, más que un mérito, es parte de nuestra naturaleza. Aprendo de los que hacen las cosas mejor que yo, pero admirar me cuesta. Hoy tengo que reconocer que admiro a mi hijo y lo hago por esa capacidad tan inmensa que tiene de ser feliz y hacer feliz a quien le rodea y no solo aprendo de él, es que quiero ser como él. Doy gracias cada día por tenerlo a mi lado.
anabmontoya@hotmail.com
Ana Blanco
Ana Blanco