Un niño que es maltratado es un adulto que va a maltratar
LegislaciónEl 17 de julio del año 2004 se puso en vigencia plena el Código para el Sistema de Protección y los Derechos Fundamentales de los Niños, Niñas y Adolescentes (Ley 136-03)
Diario Libre
La violencia está presente en la vida cotidiana de todas las sociedades del mundo.
Los niños, las mujeres, los discapacitados y los adultos en plenitud constituyen algunos de los grupos más vulnerables. Por esta razón, la sociedad de todos los países debe estar preparada para enfrentarla y, sobre todo, para prevenirla.
Pero para poder hablar de prevención antes hay que hablar de la patología como tal y reconocer que se vive en una sociedad donde cada vez se maltrata más al ser humano, principalmente al niño fruto de la violencia.
"Tan pronto tomemos conciencia de que el maltrato está presente en nuestra sociedad como algo cotidiano, ahí mismo empieza la prevención," explica el presidente de la Sociedad Dominicana de Pediatría, doctor Luis Alam Lora, pediatra-neumólogo quien junto al departamento de Ciencias de la Familia de la Universidad Católica Santo Domingo aúna esfuerzos en este sentido.
Asegura que se trata de algo complejo porque existen personas que piensan que no darle golpe a un niño es no maltratarlo y "esa no es la única manera de maltrato; decirle a un niño que lo va a llevar al médico a vacunarlo sino se porta bien es un maltrato psicológico; expulsar a un niño del colegio porque éste tenga algún déficit neurológico o de atención, es un maltrato, son muchas las formas de maltrato y vivimos en una sociedad que no reconoce el maltrato físico como una entidad que debe desaparecer para tener en un futuro hombres y mujeres con menos tendencia a la depresión y al suicidio, con menos problemas sico afectivos, menos tendencia a la agresividad que luego va a trasmitir a sus hijos".
Cada acción de maltrato que se logre determinar, ahí mismo comienza la prevención.
Dice el galeno que cuando el padre no encuentra suficientes métodos verbales y de acciones que van a favorecer su autoridad, erróneamente recurre a la agresión física la cual va a generar violencia en ese niño maltratado y esa violencia se va a devolver y será luego un niño que va también a agredir a sus hijos y se va a convertir en un hombre o una mujer con problemas de depresión y problemas sico afectivos.
No puede medirse. Asegura que la dimensión del maltrato infantil no puede medirse "es tan grave que no es medible, debemos encaminar toda nuestra acción a reconocer que existe y así entonces poder prevenir el problema para evitar que se siga dando ante nuestros ojos y no ser permisivos ante el mismo".
Los datos no se corresponden a la realidad. En República Dominicana no tenemos datos epidemiológicos que puedan orientarnos de la magnitud del problema porque estas condiciones no son comunicadas a las instancias que lo registran y, en consecuencia, los datos estadísticos que puedan aparecer no son fiables .No se corresponden a la realidad
Los más vulnerables. Los niños con discapacidad, con algún déficit neurológico, con retardo mental, están más expuestos al maltrato, al abuso, no sólo físico y psicológico sino también al maltrato de privación por no ofertarle mejor calidad de vida.
Los niños, las mujeres, los discapacitados y los adultos en plenitud constituyen algunos de los grupos más vulnerables. Por esta razón, la sociedad de todos los países debe estar preparada para enfrentarla y, sobre todo, para prevenirla.
Pero para poder hablar de prevención antes hay que hablar de la patología como tal y reconocer que se vive en una sociedad donde cada vez se maltrata más al ser humano, principalmente al niño fruto de la violencia.
"Tan pronto tomemos conciencia de que el maltrato está presente en nuestra sociedad como algo cotidiano, ahí mismo empieza la prevención," explica el presidente de la Sociedad Dominicana de Pediatría, doctor Luis Alam Lora, pediatra-neumólogo quien junto al departamento de Ciencias de la Familia de la Universidad Católica Santo Domingo aúna esfuerzos en este sentido.
Asegura que se trata de algo complejo porque existen personas que piensan que no darle golpe a un niño es no maltratarlo y "esa no es la única manera de maltrato; decirle a un niño que lo va a llevar al médico a vacunarlo sino se porta bien es un maltrato psicológico; expulsar a un niño del colegio porque éste tenga algún déficit neurológico o de atención, es un maltrato, son muchas las formas de maltrato y vivimos en una sociedad que no reconoce el maltrato físico como una entidad que debe desaparecer para tener en un futuro hombres y mujeres con menos tendencia a la depresión y al suicidio, con menos problemas sico afectivos, menos tendencia a la agresividad que luego va a trasmitir a sus hijos".
Cada acción de maltrato que se logre determinar, ahí mismo comienza la prevención.
Dice el galeno que cuando el padre no encuentra suficientes métodos verbales y de acciones que van a favorecer su autoridad, erróneamente recurre a la agresión física la cual va a generar violencia en ese niño maltratado y esa violencia se va a devolver y será luego un niño que va también a agredir a sus hijos y se va a convertir en un hombre o una mujer con problemas de depresión y problemas sico afectivos.
No puede medirse. Asegura que la dimensión del maltrato infantil no puede medirse "es tan grave que no es medible, debemos encaminar toda nuestra acción a reconocer que existe y así entonces poder prevenir el problema para evitar que se siga dando ante nuestros ojos y no ser permisivos ante el mismo".
Los datos no se corresponden a la realidad. En República Dominicana no tenemos datos epidemiológicos que puedan orientarnos de la magnitud del problema porque estas condiciones no son comunicadas a las instancias que lo registran y, en consecuencia, los datos estadísticos que puedan aparecer no son fiables .No se corresponden a la realidad
Los más vulnerables. Los niños con discapacidad, con algún déficit neurológico, con retardo mental, están más expuestos al maltrato, al abuso, no sólo físico y psicológico sino también al maltrato de privación por no ofertarle mejor calidad de vida.
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