Lluvia de críticas a EEUU tras bombardeo en Irak y Siria
Decenas de familias huyeron de sus hogares en las ciudades sirias de Deir Ezzor y Al Mayadin
Estados Unidos recibió críticas en Oriente Medio después de atacar objetivos proiraníes en Irak y Siria en represalia por la muerte de tres soldados en Jordania.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), al menos 29 combatientes proiraníes murieron en el este de Siria, incluidos nueve sirios, seis iraquíes y seis libaneses del movimiento chiita Hezbolá. Decenas de familias huyeron de sus hogares en las ciudades sirias de Deir Ezzor y Al Mayadin.
En Irak, el gobierno reportó 16 muertos, incluyendo civiles.
Estados Unidos afirmó que los ataques estaban dirigidos contra fuerzas de élite y milicias proiraníes a las que atribuyó el ataque con dron que mató a tres militares estadounidenses en una base en Jordania el 28 de enero.
Los países concernidos, así como Rusia, condenaron los ataques estadounidenses y pidieron una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para discutir la amenaza a la paz y la seguridad en la región.
La cancillería siria reaccionó diciendo que las represalias estadounidenses avivan el conflicto en Oriente Medio de forma extremadamente peligrosa. Irak denunció una violación de su soberanía e Irán condenó enérgicamente los bombardeos, advirtiendo que podrían agravar las tensiones y la inestabilidad en la región.
El movimiento al Nujaba, miembro de la "Resistencia Islámica en Irak", advirtió que respondería en el momento oportuno a los ataques estadounidenses. Hamás afirmó que estos ataques solo aumentan la tensión en la región.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, instó a evitar una escalada en Oriente Medio.
La Casa Blanca declaró que la operación fue un éxito y que Estados Unidos no busca conflictos en la región. El presidente Joe Biden advirtió que responderán si se hace daño a un estadounidense.
Estados Unidos también anunció que destruyó drones frente a las costas de Yemen para proteger la libertad de navegación.
Las fuerzas estadounidenses atacaron 85 objetivos en siete puntos diferentes, cuatro en Siria y tres en Irak. Unos 900 soldados estadounidenses están desplegados en Siria y otros 2,500 en Irak como parte de una coalición internacional antiyihadista.
La derrota del Estado Islámico fue anunciada en 2019 en Siria y en 2017 en Irak, pero la coalición se mantiene para combatir células yihadistas que siguen llevando a cabo ataques.
Según el diario progubernamental sirio al Watan, la fortaleza Al Rahba en Al Mayadin resultó dañada en los ataques.
La Casa Blanca aseguró que advirtió a Bagdad de los ataques con antelación, aunque el gobierno iraquí lo desmintió.
Desde mediados de octubre, más de 165 ataques con drones y cohetes han tenido como objetivo a las fuerzas estadounidenses desplegadas en Irak y Siria. El ataque del 28 de enero fue el primero en el que murieron militares estadounidenses.
Los ataques han sido reivindicados en su mayoría por la organización "Resistencia Islámica en Irak" y se han intensificado desde el inicio de la guerra en Gaza el 7 de octubre.